El intento de los municipios por cobrar la tasa de comercio al juego, como ocurrió en Caucete, no es nueva. Una de las peleas más fuertes tuvo lugar en Rawson, durante la administración de Mauricio Ibarra. El ex jefe comunal, a mediados del 2008, quería cobrarle la tasa al Casino de Rawson, que dependía de la Caja de Acción Social. El argumento era que esa sala de juegos era un comercio más y que ‘tiene que pagar como cualquier vecino‘, según dijo por aquel entonces Ibarra. Incluso el lugar fue clausurado en dos oportunidades. Y hasta la empresa IVISA, que administra el juego, llegó a evaluar la posibilidad de mudarse de departamento. En Caucete ocurrió una pulseada similar entre el municipio, la Caja y la empresa, por la sala de juegos que funciona en la Diagonal Sarmiento (foto), pero la que resultó perdiendo fue la comuna.
