Desorientada y sin obtener respuestas. Así pasa sus días Rosana Reinoso (37), la mamá de Lourdes Poblete, la nena que tiene autismo y que por la culminación de un convenio, se quedó sin obra social y sin las terapias necesarias para mejorar su calidad de vida.

Rosana explicó que OSPES (Obra social para el personal de estaciones de servicio, garages, playas de estacionamiento, lavaderos automáticos y gomerías) rompió su convenio con la gerenciadora de la provincia "Cuyo Salud", por lo que dejó de prestar su servicio en San Juan.

Lourdes Poblete tiene 6 años y desde los 3 le detectaron autismo. A partir de ese momento, comenzó con las terapias correspondientes y hace dos años que acude a una escuela normal acompañada de su DAI. Rosana asegura que ha progresado mucho con los tratamientos neurológicos, de fonoaudiología y psicopedagogía que la ayudan a adaptarse en una institución educativa común pero con este desamparo, la obra social no cubrirá la DAI y Lourdes podría no empezar el ciclo lectivo junto a sus compañeros.

La mamá de la pequeña contó que intentó cambiarse de obra social y buscar una solución rápida pero en las demás instituciones no le permiten acceder al servicio, ya que tiene una niña con autismo. "Nos hacen firmar una declaración jurada y cuando indico el trastorno de Lourdes, nos rechazan la afiliación", explicó con tristeza.

Además de ir a la Superintendencia de Servicios de Salud para obtener respuesta de OSPES, ha recurrido a la Defensoría del Pueblo para intimar a la obra social pero los tiempos no coinciden con los de Lourdes. "Me dicen que entre 3 y 6 meses tienen para responder. Mi hija necesita empezar la escuela y me desespera", amplió.

También acudió a Centro Educativo Terapéutico "Aurora Pérez", dependiente del gobierno provincial pero ingresó a una lista de espera de 180 niños. "La anotaron pero me aseguraron que le dan prioridad a los niños con autismo que no tienen obra social", cerró con un suspiro.

Rosana sólo quiere que la obra social que tiene su marido junto a su familia responda por ellos o que alguna prestadora los acepte para poder ver a su hija con el guardapolvo blanco en el inicio del ciclo lectivo.