Su casa no huele a perfumes caros ni a condimentos. Huele a papel. En cada rincón hay libros. De autoría propia y ajena. Aquellos que logró publicar y repartir gratis en escuelas y bibliotecas con el único objetivo de dar a conocer las obras de escritores sanjuaninos. Y de los cuales se dejó un par de ejemplares para regalar a quien se lo pida. Es Elisia Lahoz de Arévalo, una escritora que cosechó 30 distinciones provinciales, 17 nacionales y 2 internacionales por su valioso aporte a la cultura. Hace dos meses bautizaron una plaza de Albardón, su tierra natal, con su nombre.
Como si estuviera elaborando su Curriculum Vitae, Elisia comenzó a contar su historia. A los 13 años escribió su primer poema. A los 14 logró que una de sus obras fuera publicada. Y a los 16 recibió su primer premio, tras participar en un concurso literario latinoamericano. En la década del "70, y por 7 años, dirigió el Club Sanjuanino del Libro, con sede en la Casa Natal de Sarmiento. Y en 1983 se convirtió en la primera mujer en presidir la Sociedad Argentina de Escritores (SADE) filial San Juan. Estuvo 17 años en esa institución, donde la recuerdan como una luchadora incansable por destacar el trabajo de escritores sanjuaninos. Sobre todo, de quienes jamás tuvieron la oportunidad de publicar sus obras.
"Cuando estuve en SADE logré que la señora señora Isabel Samaja de Basañez Zabala nos donara el local Nro 30 de la Galería Estornell, que era de su propiedad -recordó Elisia-. Con el dinero del alquiler del mismo logré publicar 13 antologías con obras de 50 autores sanjuaninos. La prioridad la tuvieron los socios de SADE, pero también estaban quienes no lo eran. Organicé concursos literarios entre escritores ajenos a la institución, cuyo premio consistía en publicar sus trabajos en las antologías".
Elisia interrumpió su relato de repente. Y para decir en voz alta lo que estaba pensando, mientras acomodaba los libros que estaban desparramados en la mesa: "Vivo sola, pero no me siento sola. Todos estos escritores me acompañan", sostuvo.
En el 2002, Elisia Lahoz de Arévalo dejó de presidir SADE, retirándose con honores. Las 13 antologías que logró publicar fueron declaradas de Interés Cultural Nacional, por el Congreso de la Nación. Dos años más tarde logró publicar su propia antología. Y retomar la escritura porque "no concebía la vida" sin desarrollar este arte. Pero la fatalidad hizo que abandonara la pluma. En el 2006, uno de sus tres hijos, falleció en un accidente. Elisia dejó de escribir. Pero no de cosechar laureles. Sus poemas se incluyeron en "Caminos Poemas y Vida", una antología de autores argentinos que se publicó en el 2010 con motivo del Bicentenario de la Patria.