El Gobierno nacional de Cristina Fernández de Kirchner salió a anunciar ayer que garantiza "el total apoyo" al juez Manuel Campos para la investigación del fallecimiento del fiscal Alberto Nisman y resaltó que "lo importante es saber la verdad". Así se expresaron distintos funcionarios del Poder Ejecutivo, aunque la presidenta Cristina Fernández, imputada por Nisman por "encubrimiento" en la causa AMIA, no se pronunció sobre el deceso del fiscal.
El secretario de Seguridad, Sergio Berni, afirmó que según la "criminalística", "todos los caminos conducen al suicidio" en casos como el de la muerte del fiscal Alberto Nisman, a la vez que el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, garantizó "el total apoyo" al juez Manuel de Campos, encargado de investigar el hecho.
Berni, quien estuvo durante la madrugada en el edificio Le Parc de Puerto Madero donde vivía Nisman, indicó que le informó "a la brevedad" a la presidenta Cristina Fernández sobre los detalles del hecho, aunque rechazó responder sobre la reacción que tuvo la mandataria, al afirmar: "Mi función es informarle, no hacer análisis. Simplemente le he informado".
Por su parte, en su habitual conferencia de prensa brindada desde la Casa Rosada, Capitanich evitó responder preguntas aunque, tras leer el comunicado del ministerio de Seguridad, aseguró que el Gobierno daba "total apoyo" al juez que investiga la muerte de Nisman.
El juez tiene "todo el apoyo de las Fuerzas de Seguridad para garantizar un total esclarecimiento de este hecho doloroso", señaló Capitanich. En tanto, el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, calificó como "un hecho que produce un estrépito mayúsculo" la muerte del fiscal Nisman, y aseguró que "no tiene de normal absolutamente nada".
