En materia de seguridad vial, la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT) es la encargada de controlar vehículos de transporte de pasajeros y de carga generales y sustancias peligrosas, que provienen o se van a destinos que están fuera del territorio provincial. Este organismo labra, en promedio, entre 55 y 60 actas de infracción. Y, según sus registros, un 40 por ciento de ellas son por exceso de velocidad.
Es decir que casi la mitad de los vehículos de pasajeros y de carga controlados por la CNRT que viajan por las rutas sanjuaninas sobrepasa el máximo de velocidad permitido, que es de 90 kilómetros por hora. Esto se controla con un aparato denominado tacómetro, ubicado en la cabina del chofer (ver aparte). A ese artefacto sólo pueden acceder los inspectores de la CNRT y allí queda registrado cada vez que el chofer excede el límite de velocidad.
Por este tipo de infracciones los choferes sufren la retención o paralización del vehículo, ya que se trata de una falta mayor. El segundo motivo en la lista de infracciones, según informaron los inspectores de la CNRT, es la falta de documentación, ya sea del vehículo como del chofer. Esa es otra de las infracciones más graves, junto al exceso de horas de trabajo de los choferes (en cuyo caso se demora el vehículo hasta que llegue un reemplazo para el chofer), la falta o alteración del registro de los tacógrafos, y de calefacción o refrigeración en el caso de transportar pasajeros. "Nos ha pasado en pleno verano que detectamos movilidades que vienen del Norte sin aire acondicionado y hemos tenido que autorizar que rompan los vidrios para que circule el aire. Cuando llegan, la empresa no sólo tiene que reponer los vidrios sino que también tiene que pagar la multa", comentó Marcelo Manini, delegado de la CNRT San Juan.
Entre las faltas menores comúnmente detectadas se encuentran la ausencia de martillo de seguridad para romper el vidrio en los casos de emergencia, la carga vencida o faltante en los matafuegos y la presencia de vidrios trizados. En todos estos casos, la CNRT hace una advertencia y da un plazo de 5 días para regularizar el inconveniente antes de hacer un acta de infracción.
Las inspecciones se hacen con el apoyo de Gendarmería Nacional tanto en la terminal de pasajeros como en la ruta, en el caso de los transportes de carga. Por día, la CNRT controla unas 35 unidades de transporte de pasajeros y el doble de transportes de carga. Pero esa no es la única tarea que cumple este organismo. También es la encargada de controlar los pases para discapacitados, hace operativos de alcoholemia y detección de material radioactivo en ruta, inspecciona la salubridad de las unidades (baño, limpieza, servicios de catering), informa sobre las empresas de turismo habilitadas y recibe las denuncias de pasajeros por mal trato de choferes o personal de las empresas o por problemas con el equipaje, entre otras cosas.