"Mamá, llegó el corazoncito. Venite rápido". El relato de María Angélica de Brizuela estremece. "Él fue quien me avisó por teléfono. Yo había ido a dejar unas fotos para un diario cuando me sonó el celular. Y me volví volando al hospital. Por fin, por fin, venía diciendo. Si Dios quiere, él va a poder hacer lo que tanto sueña, que es jugar en la calle, jugar con sus hermanos. Él siempre pregunta si va a llegar a ser grande…", agregó la madre, emocionada. Ayer en la madrugada, la espera de 11 meses de Juancito Brizuela conectado a un corazón artificial llegó a su fin. El niño del departamento Sarmiento, cuya historia conmovió a la provincia y al país en el 2009, fue trasplantado del corazón en el hospital Garrahan, de Buenos Aires.
Juancito, de 11 años, tenía un cuadro de miocardiopatía dilatada y encabezaba la lista de emergencia nacional del Incucai. Y ayer recibió el esperado órgano gracias a un donante de La Plata. "Ahora los médicos me dijeron que tenemos que esperar 48 horas. Pero va reaccionando bien", dijo María. Sí, 48 horas separan a Juancito de alcanzar su milagro después de haber estado 11 meses internado en Buenos Aires, más siete meses previos en el Hospital Rawson, cuando fue detectado su problema cardíaco. Esas horas son claves en la evolución del chico, para determinar si el organismo acepta el corazón.
Anoche, el parte médico emitido por el hospital indicaba que la operación fue "un éxito", que Juan permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos "hemodinámicamente compensado" y recibe "el tratamiento post trasplante correspondiente que incluye la Asistencia Ventilatoria Mecánica".
Juancito se enteró antes que su mamá de que iba a ser trasplantado, en la noche del miércoles. Y después de la emoción, un rato después se quedó dormido. A las 2 de ayer fue bajado de la unidad de terapia intensiva y antes de ingresar al quirófano lo despertaron. Ahí se despidió de su madre.
La espera de Juancito en el quirófano duró cuatro horas, cuando llegó el órgano. Casi 60 minutos después se inició la ablación. La operación duró poco más de siete horas, más tiempo de lo habitual por la larga permanencia previa del paciente en corazón artificial, según el parte médico.
"Lo vi cuando salió del quirófano. Estaba dormido. Yo estaba muy emocionada y sólo le dije: Que Dios te ayude, m’hijo. Quiero agradecer a los cirujanos y a la mamá del donante, que se puso la mano en el corazón para mi hijo viviera", dijo María Angélica.
La historia de Juancito se hizo conocida tras una nota de DIARIO DE CUYO, en abril del año pasado. Es que además del drama y la lucha por vivir del niño, siempre acompañado por su madre en el hospital Garrahan, el padre y sus tres hermanitos vivían en un carpa de lona y palos en Colonia Fiscal. Miguel, el papá, estaba desocupado y había vendido sus herramientas de un taller mecánico. Luego, recibió ayuda del gobierno nacional, de la provincia, de la municipalidad de Sarmiento y de personas anónimas, al punto que los Brizuela recibieron un casa nueva.
Ahora, lo que viene para Juancito también será largo. "La recuperación va a llevar un tiempo, por el tema de que puede haber un rechazo o enfermarse y la atención tiene que ser rápida. Yo no creo que vaya a volver a San Juan. Los médicos me dijeron que él va a necesitar su propia pieza, su propio baño, porque no se puede pescar ningún virus, así que vamos a ver cómo sigue todo desde ahora", apuntó María.
Ayer, el intendente de Sarmiento, Alberto Hensel, dijo que se comunicó con él Alicia Kirchner, ministra de Desarrollo Social, y que prometió ayuda. "Me informó que va a enviar equipamiento para toda la casa de Juan y que construirá una habitación para cuando venga el niño, con todos los elementos que sean necesarios. Por eso nos pidió un informe médico, para determinar qué cosas debe tener el cuarto de una persona trasplantada. La municipalidad brindará la mano de obra", apuntó Hensel.

