A poco más de tres meses de la inundación que castigó al departamento de Sarmiento, ya no quedan familias evacuadas en el exhospital, que funcionó como refugio para 20 familias que eran las últimas que faltaban reubicar. A sus viejos ranchitos o, los menos, a alguna casa alquilada, los afectados se mudaron tras recibir un subsidio gubernamental de 4.800 pesos por familia para que puedan alquilar o mejorar provisoriamente sus viviendas dañadas, al menos unos dos meses más que es cuando tienen previsto entregar las casas de un barrio en construcción del IPV.
‘Yo en mi ranchito viví 12 años y pese a todo, lo extrañaba. No encontré alquiler, así que estoy comprando algunos materiales para hacerle unos parches a mi pieza, que para colmo me la desvalijaron; una sola silla me dejaron. Ojalá que pronto nos entreguen la casa’, contó Marisa Díaz, madre de tres hijos, mientras mostraba unas bolsas de cemento y media camionada de arena que mandó traer.
Una vecina, Sandra Nieto, dijo que por tener 9 hijos no consiguió que nadie le alquilara, así que optó por comprar palos y nailons para hacerse una pieza provisoria. “Ahora quiero hacerme un saloncito de adobes, por lo menos hasta que nos den la casa. La verdad, estaba más cómoda en el hospital’, reconoció la mujer, quien es mamá de chicos de 22 años a 10 meses de edad. Ella y su familia volvieron al terreno familiar de la calle San Luis, al Oeste del cementerio, que tiene luz pero no agua potable, por lo que son asistidos por un camión cisterna.
En tanto, en la Villa Media Agua, los Ruffinengo también optaron por instalarse en un ranchito, por calle 25 de Mayo. La jefa de familia, Viviana, está buscando alquilar una vivienda para sus cuatro hijos, aunque por ahora no encuentra, según contaron. Margarita, la hija mayor, mientras tanto cuida a sus hermanos, que también se esperanzan por ese barrio de 60 viviendas, cuyo primeros destinatarios serán unos 67 niños y 26 adultos, que desde fines de enero pasaron sus días en las dependencias del exhospital Ventura Lloveras.
Al barrio de 60 unidades, que empezó a construirse hace dos años, decidieron terminarlo de urgencia tras el temporal e incluso le dieron prioridad de terminación a 20 casas, para asistir lo más pronto posible a los evacuados del exhospital.
Las familias que estaban allí decidieron dejar el complejo luego de que desde la Municipalidad de Sarmiento les aseguraran que iban a convertirse en adjudicatarias de las viviendas del barrio, a la vez que el Ministerio de Desarrollo Humano les entregó ese subsidio de $4.800, informaron las autoridades.