San Juan, 16 de julio.- Junto a la geoforma conocida como El Submarino, los turistas que llegan al Parque Ischigualasto, Patrimonio de la Humanidad, se deleitan con la degustación de los mejores vinos sanjuaninos, imprevistamente, comienzan a escuchar los acordes de los violines, el sonido del bandoneón y de repente una pareja de baile cautiva a los turistas en vacaciones de invierno con el tradicional ciclo de Música Clásica, Tango y Vinos y que continúa del 17 al 22 y del 26 al 28 de julio.
“Música Clásica, Tango y Vinos en Ischigualasto” es una iniciativa impulsada por el Ministerio de Turismo y Cultura para promover el sitio turístico más emblemático de la provincia, incorporándole un plus que permite a los visitantes conocer parte de la cultura y la producción de San Juan.
Llegados desde distintas partes del extranjero, de varias provincias argentinas y desde el mismo San Juan, los visitantes se emocionan con este Ciclo en el que se ejecuta un variado repertorio de diversos géneros como Libertango del inolvidable Astor Piazola; El lago de los cisnes de Tchaikovsky; Danza Húngara de Johannes Brahms; pasando por lo local con un homenaje a Saúl Quiroga con Sangre Extranjera; Las dos puntas de Rocha y Ocampo; y Vallecito de Buenaventura Luna, entre otros.
Con un buen Pinot Grigio; un Malbec; Syrah;, Chardonnay o bivarietales de las bodegas Graffigna, vinos artesanales de El Milagro, Mil Vientos y Callia, los turistas adultos realizan degustaciones acompañados de productos regionales; mientras que los más chicos, saborean caramelos de dulces de membrillos y pasas.
Durante el ciclo, un grupo de santafesinos que integraban una academia de folclore se sintieron gratamente sorprendido por la iniciativa y sin dudar llenaron de color el escenario y por un largo tiempo mostraron sus destrezas al resto de los turistas quienes bailaron acompañados del grupo Opus 7. “Estamos viviendo un momento inolvidable”, coincidieron los miembros del contingente mientras ponían a prueba sus habilidades.
La misma sensación describieron los turistas austríacos, belgas, alemanas, brasileros, chilenos; algunos rosarinos, neuquinos, mendocinos, cordobeses y hasta los propios sanjuaninos, que llegaron a Ischigualasto para recorrer el circuito tradicional y se sorprendieron con esta propuesta.
