San Juan, 13 de septiembre.- Los hechos de violencia dentro de las escuelas son cada vez más frecuentes. Y ante la golpiza con amenaza de muerte que recibió una maestra por parte de una madre, la Unión Docentes Agremiados Provinciales salió al cruce. Es que el secretario adjunto de UDAP, Luis Lucero, solicitó mayor presencia del Estado para evitar estos hechos que son reflejo de la violencia social que actualmente se vive en la provincia y en todo el país.
“Estas circunstancias se califican como violencia escolar pero desde UDAP somos más amplios y consideramos que son manifestaciones que tiene la violencia social que de otros ámbitos que repercuten en las instituciones educativas. Pensamos que es fundamental que haya normativas que sean sostenidas en el tiempo y que apunten a la prevención con un compromiso más fuerte del Estado”, expresó Lucero.
El gremialista destacó que estas situaciones vienen creciendo tanto en el ámbito nacional como en la provincia y que hoy en día, “la escuela es una caja de resonancia”. Además, planteó “la necesidad de profundizar políticas públicas para hacer frente a esta realidad”. “Cuantas cosas hizo la institución educativa en las cuales no deja de reconocer la responsabilidad indelegable del Estado y el gremio participa permanente con un equipo de mediación recorriendo las instituciones educativas”, explicó.
Este planteo y pedido de mayor compromiso del gremio que representa a los docentes se dio tras la batalla campal vivida en la escuela Paso de Valle Hermoso, ubicada en las inmediaciones del barrio Los Cardos y la Villa Paula, en Chimbas. Allí la madre de una de las alumnas de 5to Grado, entró al aula y delante de todos los estudiantes, tomó del cuello a la maestra, le pegó, la insultó y hasta la amenazó de muerte. Por eso, las autoridades del establecimiento decidieron suspender las clases en el día de ayer y la docente Analía Matarazzo, quien tiene miedo de volver a clases, pedirá al Ministerio de Educación que la cambien de escuela.