Después de las obras de reparación que realizaron en las dependencias de UNSJ, casi la totalidad de las aulas en las que se dicta las clases teóricas de las facultades y los colegios fueron autorizadas para su uso. Pero los obreros todavía están trabajando en algunos laboratorios y talleres, sobre todo en los institutos preuniversitarios, en tres departamentos completos de la Facultad de Ingeniería, en las canchas de El Palomar y en los centros de investigación. En consecuencia, los chicos están perdiendo clases prácticas. Las autoridades dijeron que le dieron prioridad al dictado de la teoría y que después verán cómo recuperan el tiempo perdido en las prácticas.
Sobre el tema, el rector de la UNSJ, Benjamín Kuchen, comentó que "las clases prácticas se pueden posponer y reacomodar. Lo importante es que se está dictando las clases teóricas".
Después de la muerte por electrocución de un alumno en la Facultad de Ingeniería y de la reparación e inspección de las conexiones eléctricas de las dependencias de la UNSJ, desde la institución habían informado que a comienzos de esta semana las actividades en la universidad se normalizarían. Pero si bien todos los alumnos volvieron a las aulas, todavía hay clases que no pueden tomar.
En los 3 colegios preuniversitarios las clases se reanudaron hace una semana. Pero los laboratorios y talleres todavía están cerrados. Según comentó la vicedirectora del Central Universitario, Claudia Viberti, en la escuela no están autorizados para su uso el taller de artes ni los laboratorios. Por su parte, en el edificio en el que funcionan la Escuela de Comercio y la Industrial, todavía no están habilitados los talleres, los laboratorios, los gabinetes de computación y las salas de video. Según comentó el jefe de Preceptores del colegio Industrial, Alfredo Cortés, lo que están haciendo los obreros en esas salas es cambiar el sistema de los tomacorrientes.
Tampoco está autorizado el uso de los playones deportivos de El Palomar, por lo que los alumnos no tienen Educación Física. En el complejo dijeron que están arreglando los tableros de electricidad y han cortado la energía en todos los playones. Y que, a pesar de que no hay luz, los chicos podrían tomar las clases durante el día, pero el problema es que, sin electricidad, no funcionan las bombas de agua y no hay agua en los baños ni en los bebederos.
De las facultades, la que tiene más departamentos cerrados es Ingeniería. Si bien el lunes pasado comenzaron a cursar los alumnos de todas las carreras, los departamentos de Ingeniería en Minas, Civil y Agrimensura están cerrados para los alumnos y los obreros trabajan en sus instalaciones eléctricas. Según comentó la secretaria Académica, Mabel Barrera, los alumnos de esas carreras están cursando en aulas de otros departamentos. Por eso, en muchos casos no pueden dictar las clases prácticas, porque no tienen los elementos necesarios.
Siguiendo con las facultades, al entrar a Ciencias Exactas, se puede ver un cartel en la puerta del box de dibujo técnico que dice: "No pasar, electricistas trabajando". En el edificio central de esta facultad, la actividad se reanudó el lunes pasado. Y, según la secretaria Académica, Nancy Alonso, además de ese box, aún están sin funcionar el Observatorio Astronómico Félix Aguilar, el Instituto de Geología y los departamentos de investigación.
En Arquitectura sólo falta la autorización para el uso del Aula Magna. Y en Sociales, los alumnos no comienzan a cursar hasta el próximo 6 de abril porque están rindiendo exámenes. Por eso, no tienen inconvenientes. Mientras que en Filosofía, según el decano Paolo Landini, aún no están funcionando los departamentos de postgrado, de expresión verbal ni los centros de investigación.
En todos los casos, las autoridades coincidieron en que no saben con precisión la fecha en que podrían comenzar a funcionar los espacios que aún no están autorizados por los inspectores.

