Llegó finalmente el día de la inauguración de la Fiesta Nacional del Sol 2011, y nadie se esperaba semejante previa: un accidente con más de veinte heridos en el autódromo durante el ensayo del espectáculo final, más un pronóstico climático que indica que lloverá las noches de prácticamente toda esta semana. En cuanto a lo primero, afortunadamente no hubo heridos graves (ver página 12) y el espectáculo continúa. Y sobre lo segundo, no hay plan B en caso de que haya tormenta todas las noches a partir de hoy. "Sé que no va a llover ninguna de las noches de la fiesta", dijo el ministro de Turismo, Dante Elizondo, pese a los pronósticos.

En caso de lluvia, aunque no lo digan abiertamente, es algo que preocupa. Ni siquiera la inauguración de esta tarde a las 20.30 se hará bajo techo. Muchos de los stands de la feria también estarán descubiertos, al igual que al menos uno de los escenarios. Y ni qué decir del show final en el autódromo: los 390 artistas actuarán con el cielo sanjuanino como techo, y cada persona del público los verá en las mismas condiciones. Entonces sobrevuela el fantasma de la preocupación con el pronóstico extendido difundido ayer por el Servicio Meteorológico Nacional: habrá tormentas nocturnas, de forma sostenida, al menos hasta el próximo jueves. A eso, la web especializada Infoclima.com agrega un pronóstico de lluvias para la noche del viernes y un amenazador tejido de nubes para la del sábado.

Como dato alentador, está el antecedente: en la edición 2008 llovió con ganas durante la noche inaugural, tanto que obligó a retrasar varias veces los espectáculos programados para esa noche, incluido el recital el Alejandro Lerner, pero la gente que había ido al Predio Ferial lo había soportado con estoicismo. Los que miraban el show se cubrían la cabeza con las sillas, los que paseaban por el predio se enfundaban en pilotos o bolsas plásticas. Los menos valientes quedaban acurrucados debajo de los alerones y los techos de algunos stands. Y entrada la madrugada, cuando amainó, quienes quedaban allí se pusieron tan contentos que hasta se lo vio al ministro Daniel Molina bailando con una murga que celebraba el regreso (imaginario) del Sol de esa noche. Pero para el autódromo hubo mejor suerte: la naturaleza se apiadó y dejó de llover justo unas horas antes de que empezara el espectáculo.

"Estamos muy confiados con el clima", dijo el ministro Elizondo. Y con tono de optimista expresión de deseo, agregó: "Le estamos poniendo todas las pilas a la fiesta para que salga bien". Algo más que necesario para que esta edición 2011 pueda sobreponerse a todos los inconvenientes de la previa y lograr el éxito de las anteriores.