�El incierto panorama sobre la ley de EEUU que estableció el embargo hace que puedan pasar años antes de que las sanciones sean levantadas totalmente. La Ley Helms-Burton establece que el embargo no se puede terminar hasta que Cuba inicie una transición hacia un Gobierno democrático que excluya al actual presidente Raúl Castro y su hermano Fidel. Salvo acontecimientos imprevistos, es probable que Castro permanezca en el cargo durante algunos años más, aunque ya anunció que no buscará la reelección en 2018. Además, el Congreso de EEUU estará en manos de los republicanos al menos hasta después de las elecciones de 2016, por lo que el apetito legislativo en Washington para poner fin al bloqueo sin duda será limitado.
El senador republicano Marco Rubio dijo que ‘haría todos los esfuerzos‘ para impedir que Obama normalice las relaciones con Cuba después de describir la decisión del Presidente como ‘inexplicable‘. Y en caso de que las sanciones sean levantadas, una queja cubana probablemente seguirá dando vueltas: la presencia de EEUU en la Base Naval de Guantánamo. EEUU arrienda el terreno donde se encuentra la base desde 1903, aunque Cuba no ha aceptado pagos por décadas.
