Un nene de 11 años llora sin consuelo debido al dolor que le provoca la herida que le dejó la mordedura de una pitbull. Además, por las noche tiene pesadillas y vive atemorizado luego del ataque que sufrió el miércoles cuando fue a visitar a una tía, en el Médano de Oro.
Según lo que relata la familia, el niño, quien es mudo y tiene retraso madurativo, estaba en el fondo de la casa de un familiar mirando un caballo cuando una pitbull lo atacó. El animal le mordió la pierna y el menor tuvo que ser hospitalizando donde le hicieron 15 puntos de sutura.

Además, le dieron 10 días de reposo pero este lunes, en el último control, le indicaron que tiene la herida hinchada y muy colorada. Por lo que deberá tomar mayores recaudos para evitar que se le infecte.
Por desgracia, la perra que lo atacó no está atada o encerrada, por lo que temen que vuelva a hacer daño.

