Benjamín Olivares, de 8 años, dejó de ir a la escuela y estaba haciendo reposo, como es normal ante un cuadro de varicela. Pero anteanoche empeoró. Perdió el control de sus esfínteres y el equilibrio. Su madre lo llevó al doctor a las 5,30. Los médicos de un sanatorio privado lo atendieron, lo internaron y una hora después el niño falleció. Según comentaron desde el Ministerio de Salud, si bien es extraño, ya que sólo se da en el 1% de los casos, esta enfermedad eruptiva puede derivar en complicaciones y una de ellas es la encefalitis, que es lo que aparentemente provocó la muerte del niño.

Según Noelia Duarte, integrante del equipo de Epidemiología de Salud Pública, la muerte del niño fue tan repentina que los médicos no tuvieron tiempo de hacerle ni los estudios neurológicos. La infectóloga dijo que “si bien la varicela es una enfermedad sin mayores dificultades, en alrededor del 1% de los casos puede complicarse, principalmente si se tiene una enfermedad inmunodepresora. El caso más común es que, por las ampollas que genera la enfermedad, ingrese alguna bacteria que provoque sobreinfección. Pero también hay casos en los que se genera neumonía o meningoencefalitis, es decir, que se produce una inflamación del encéfalo. Aparentemente, este fue el motivo de la muerte”. Duarte destacó que “es normal que haya muchos casos de varicela en esta época, ya que su pico se inicia en septiembre. Lo que sí deben hacer los papás es estar atentos y consultar al médico ante los síntomas, que son fiebre, catarro, mucosidad y la aparición de las manchitas que se transforman ampollas y luego en pequeñas costras”.

Ayer no hubo clases en la escuela que asistía el nene, por duelo y aprovecharon para realizar una desinfección para tranquilizar al resto de los padres.