En sus rezos, no sólo agradece por conservar su trabajo y tener a sus hijos sanos, sino que todos los años va a San Expedito para pedir por algo más grande y que no sólo lo incluye a él y sus allegados. Marcelo Bustamente (40) simplemente pide por la Argentina, por el bienestar del país. Por eso, lo hace envuelto en una gran bandera celeste y blanca, no sólo frente a la imagen ubicada en el interior de la capilla, sino que luego se desplaza hacia el patio y realiza otra fila para orar ante la imagen de la gruta.
‘No sé si soy patriota o nacionalista, pero siento que tengo la necesidad de pedir porque a la Argentina le vaya bien, porque ahora salgamos de la crisis, para que San Expedito proteja a todos los habitantes del país y que no suframos catástrofes naturales’, indicó el hombre.
Marcelo es enfermero y ayer llegó a Bermejo acompañado de sus padres y sus hijos, como cada año.
‘Tengo que reconocer que conocía poco de San Expedito, hasta que una vez me invitaron, vine, pedí por trabajo y se cumplió. A partir de entonces, hace ya muchos años, no dejo de agradecer en cada fiesta patronal que se celebra en Bermejo. También me pasa que pasara lo que pasara, de alguna manera siempre logré llegar a Bermejo para esta fecha y en eso creo que también está la mano de San Expedito, que ayuda a las personas en su devoción’, indicó.