’Inesperado’ fue la palabra que utilizó Adrián Alonso para referirse al Premio Santa Clara de Asís que recibió el fin de semana pasado. Se lo otorgó la Liga de Madres de Familia y no sólo por su trayectoria como periodista agrario, sino también por su ’valor moral, educativo, documental y formativo’. La Comisión Arquidiocesana de la Liga, en San Juan lo propuso como postulante a este galardón, recibiendo la aprobación de la Liga nacional para integrar una terna. Es la segunda distinción a nivel nacional que recibió el periodista de este diario.

Es enólogo, licenciado en Comercio Internacional, periodista agrario, profesor de Liderazgo al estilo de los Jesuitas y coordinador del Programa Calidad de los Alimentos. Alonso tiene varias profesiones, pero que comparten algunos objetivos en común: todas están relacionadas en parte a mostrar el desarrollo y evolución de la actividad agrícola-productiva y a enseñarle a la gente cómo promover su propio desarrollo económico. Este último punto fue el que tuvo mayor incidencia para que la gente de la Liga de Madres de Familia lo hiciera acreedor del premio. ’Desde el Liderazgo al estilo de los Jesuitas que sostiene que el reino empieza en la Tierra, promovemos el desarrollo económico de la persona con sus propios medios y creatividad para que esté tranquila y de esta manera poder escuchar mejor a Dios. Lo hacemos a través del trabajo misionero, apuntando a la familia’, dijo el periodista.

En 1994 Alonso comenzó su trabajo en los medios de comunicación con un microprograma radial de 3 minutos, tiempo que aprovechaba también para aconsejar a la audiencia sobre cómo encarar un trabajo o pequeña empresa. Dos años después ingresó a DIARIO DE CUYO para desempeñarse como redactor en el Suplemento Verde, función que aún desempeña. Dijo que este trabajo le permitió ser testigo de los grandes cambios que atravesó la provincia en materia agrícola y productiva. ’Vi como con las leyes de Promoción Agrícola e Industrial se transformaron algunos cerros en viñedos para ampliar la superficie cultivada y cómo se fomentó el uso de la tecnología para mejorar la producción. También, como años después, se diversificó el cultivo para dar paso a las plantaciones de pistacho, frutas y semillas hortícolas que contribuyeron a mejor un poco la economía provincial’, agregó.