Aunque el director de Planeamiento de la provincia, Juan Manganelli, dice desconocer por completo el proyecto de ley que presentó esta semana el diputado del Frente de Producción y Trabajo, José Peluc, sabe que tarde o temprano terminarán por consultarle su visión. El mismo Peluc está esperanzado en que el borrador de su autoría sirva para remediar una falta que históricamente tiene la provincia en materia de legislación territorial.

´El ordenamiento territorial es una deuda que tienen los gobiernos con San Juan. Hasta ahora no se ha hecho nada al respecto´´, define quien decidió pasar de la queja a la acción motivado por su propia realidad: Peluc es viñatero, tiene una finca en Angaco que tuvo que abandonar porque al lado le instalaron un barrio. ´Entre los robos, que cualquiera entraba a la finca, que se perdía el agua, decidí dejarla. No soy el único lo mismo ocurre en Pocito, en Santa Lucía, en Albardón. Si en cambio, se respetaran los espacios para el desarrollo urbano y las zonas agrícolas, si hubiese un ordenamiento y una planificación, esto no debiera pasar. Más teniendo en cuenta el escaso terreno fértil que tiene San Juan y esto el gobierno lo sabe, ya que ellos mismos promocionan en sus publicidades que la provincia solo tiene un 3% de su territorio para la agricultura. Entonces no se puede cementar esas tierras. Pero esto no es lo único que pasa en la provincia. Por ejemplo en un radio de entre 5 y 10 cuadras para la vida institucional de la provincia: está la Legislatura, el Centro Cívico, la Casa de Gobierno, además del parque, los museos, escuelas, un centro comercial. Si se corta por cualquier razón la Avenida Libertador se rompe con la actividad usual de la provincia. Esto debe repensarse. San Juan es una ciudad moderno y debe preverse un sistema ordenado para seguir adelante con inteligencia y aprovechando los recursos que tenemos´´, explica el diputado que recurrió a un especialista en Geografía para que lo asesore ya que sus intenciones son una vez que se convierta en el ley su proyecto comenzar a trabajar en una ley de suelos.

´Cuando se defina qué terrenos son para construir, qué terrenos para la industria y la minería y qué terrenos para la producción, se podrá designar también que porcentaje de agua les corresponde´´, adelanta.

En su propuesta que tiene un amplio detalle de fundamentaciones y antecedentes, Peluc plantea en 42 artículos, cuestiones que van desde la definición básica de ordenamiento territorial, ambiente, territorio y sustentabilidad; los instrumentos y actores intervinientes para la determinación de las zonas, el dar lugar a las universidades y los poderes del Estado para que opinen a través de un Consejo de Ordenamiento Territorial. Incluso plantea la necesidad de rever y reevaluar los planes de ordenamiento “cada cuatro años o cuando las circunstancias lo ameriten´´, según se propone, entre otros puntos.

El proyecto en cuestión fue derivado en la última sesión para su tratamiento en tres comisiones: la de Municipalidades, la de Obra y Servicios y la de Hacienda.