Las autoridades de la Municipalidad de la Capital iniciaron ayer un sumario administrativo interno, para determinar si efectivamente ingresó la notificación de la Anses sobre la jubilación de Pascual Manchineles y si es así, quién o quiénes fueron los responsables de que no llegara hasta el área que le debe dar de baja a los empleados que pasan a retiro. La primera medida fue en el Departamento Personal, el área donde debería haber ingresado al escrito del organismo nacional. En el municipio presumen que ahí fue cajoneada la notificación, para que no se conociera que el líder sindical se jubiló y pudiera seguir cobrando como empleado municipal. A primera hora de la mañana, dos funcionarios de la gestión de Lima y una escribana (foto) llegaron hasta esa dependencia, pidieron el legajo de Manchineles y un empleado se los entregó sin problemas para que empiecen a investigar qué fue lo que pasó.