Hasta el tiro de esquina que ejecutó Mariano Torresi y que aprovechó con un cabezazo Luis Tonelotto a los 9 minutos del complemento para abrir el marcador, el panorama no era de lo mejor para San Martín. Solamente en la jugada anterior, cuando Díaz sacó al corner un fuerte remate externo de Torresi, el verdinegro había creado peligro frente al arco correntino. Pero también hasta ese momento San Martín había mantenido el arco invicto, gracias a que los dos defensores centrales primero, y el arquero después, se mostraron muy seguros en los centros que boca Unidos envió al área verdinegra. Por esa vía, cerca de finalizar el primer tiempo fue cuando el equipo correntino estuvo más que cerca de poder abrir el marcador. El gol de Tonelotto fue un golpe psicológico. San Martín se tranquilizó y desplegó su mejor juego a ras de piso. Pero la clave estuvo en el juego aéreo.
