�El escándalo que desató la publicación de millones de documentos secretos sobre sociedades offshore nació de una denuncia anónima que llegó a un diario alemán hace poco más de un año. Una fuente anónima que no quiso ni dinero ni ningún tipo de contraprestación -pero sí algunas medidas de seguridad- se contactó hace más de un año con el diario alemán Süddeutsche Zeitung (SZ) para transferirle los documentos internos de Mossack Fonseca a través de una vía encriptada.
Debido a la magnitud de material, el SZ decidió compartir la información con el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ). Así, más de 300 periodistas de 76 países analizaron de manera conjunta los detalles del funcionamiento de este estudio de abogados.
