Desde el 2005 que funciona en el ámbito del Ministerio Salud Pública, el Programa Provincial de Atención al Paciente con fisura de labio-albeolo-palatino. Justamente su razón de ser tuvo que ver con el alto grado de incidencia de la patología conocida como labio leporino en los nacimientos sanjuaninos. De hecho los números hablan a las claras de esta realidad: mientras en San Juan nace un chico con esta deformación cada 600 personas, en el país ocurre en 1 cada 800. Es por eso que las autoridades sanitarias buscaron como trabajar y tratar a estos pacientes, según explicita Silvia Rosas, coordinadora de este programa.
Científicamente está comprobado que esta falta de unión y conexión entre las parte de la boca ocurre entre la 4¦ y la 6¦ semana de gestación. Se puede padecer de labio leporino de forma unilateral o bilateral. No hay una única causa para este problema: algunos estudios lo centran básicamente en la falta de ácido fólico fundamental para la formación del feto, pero hay otros estudios que indican que se trata de una multiformidad de motivos, como los genéticos (la incidencia de familiares que también nacieron con labio leporino), además de factores ambientales tales como el consumo de alcohol, drogas, mala nutrición, etc.
El único tratamiento para resolverlo es quirúrgico e implica, según la gravedad del caso, al menos 3 operaciones.
"Por suerte con los avances tecnológicos se puede saber por medio del diagnóstico por imagen si un chico va a nacer con labio leporino o no. Ahí es cuando empieza a trabajar el programa, no solo haciendo relevamiento, sino además tratando de antemano a la familia con un equipo interdisciplinario de médicos, cirujanos, psicólogos, genetistas, odontólogos, ortodoncistas. El trabajo es para fortalecer a la mamá y al resto de la familia porque a muchos les cuesta aceptar al bebé que nace con una fisura en su boca. A partir de los tres meses se comienza el tratamiento con el bebé en la mayoría de los casos. Por este programa ya han sido atendidos alrededor de 280 pacientes de toda la provincia”, explica la profesional que el año 2013 recibió en la provincia a colegas de todo el país que se ocupan de resolver esta patología, que afecta a quien la padece no sólo funcional y estéticamente sino además psicológicamente ya que es blanco de burlas porque puede no hablar bien o por la forma de su boca. Por eso este año, el objetivo del programa a nivel local es dar charlas de concientización en las escuelas de la provincia.
¿Donde se puede recurrir por ayuda? Hay tres lugares claves: el Consultorio de Fonoaudiología del Servicio de Pediatría "Dr. Juan Carlos Navarro” (lo que era el ex Hospital de Niños, colindante con el Hospital Rawson), en el Instituto Odontológico "Dr. Cayetano Torcibia” (sobre la calle Rivadavia) o en el Departamento Odontología (en el tercer piso del Centro Cívico).
