Desde las 7:30 hs la familia Ramírez comenzó a preparar la canasta con todo lo necesario para un picnic. Quiso llegar temprano al complejo Ceferino Namuncurá, en San Martín, para buscar la mejor ubicación. A las 8:45 se instaló junto a un parrillero ubicado bajo un árbol frondoso. Y justo frente al escenario donde por la tarde se celebró la Santa Misa para conmemorar el 123 aniversario del natalicio del patrono de los estudiantes. Nació el 26 de agosto, pero la fiesta en su honor se postergó hasta ayer para que coincidiera con el primer año de inauguración del complejo que lleva su nombre. Pero la familia Ramírez no fue la única que madrugó para participar de las celebraciones religiosas, y que aprovechó la ocasión para disfrutar de un día al aire libre, con asado de por medio.
Ayer el complejo Ceferino Namuncurá fue cede de un picnic multitudinario.
Las 1.200 personas (según cálculos de la Policía) que concurrieron al lugar para participar de la procesión y misa en honor al Beato, llegaron muy temprano en la mañana, y provistas del equipo de camping. La familia Gómez llegó a las 8:30, ocupó un parrillero y armó la carpa para que los tres hijos del matrimonio durmieran un poco más. Y estuvieran bien despiertos para la procesión y misa.
A las 19 comenzó la celebración de la palabra de Dios, y muchos participaron de la misma sin abandonar los parrilleros. Don Juan se apuró a limpiarse la grasa de las manos para darle el saludo de la paz al hombre que se encontraba a su derecha, después de que tiró unas costillas a las brasas para hacer el segundo asado del día. Después, y a modo simbólico, levantó el vaso de gaseosa para saludar a la familia del parrillero de enfrente, que también tuvo una ubicación privilegiada para disfrutar del show artístico y del espectáculo de fuegos artificiales que iluminó el cielo por 20 minutos.

