El verde del césped a lo largo de calle Nacional, en Angaco, ya se ve desde lejos. Pero, los vecinos tienen miedo de que no sobreviva por mucho tiempo más. Todos los días amanece roto el sistema de riego que instaló el municipio para su mantenimiento. El intendente, José Castro, dijo que a raíz de este vandalismo se frenó, por ahora, la obra de parquización que abarcará por unas cuadras más. Esto llevó a que el funcionario usara su cuenta de Facebook

para subir fotos de los destrozos provocados y para perderle a los vecinos que cuiden esta obra que se inició hace tres meses.

La instalación del sistema de riego en esta primera etapa de la parquización de calle Nacional, entre Divisoria y Santa María de Oro, costó unos 50.000 entre mano de obra, cañería y bombas de agua. Desde que comenzó a funcionar se lleva invertido unos 12.000 pesos en la reposición de los artefactos que a diario rompen los vándalos.,

A lo largo de las 8 cuadras parquizadas hasta ahora se instalaron 12 salidas de agua de una tubería subterránea, conectada a una perforación, para lograr un riego óptimo y parejo del césped. Ayer, todas las salidas amanecieron rotas. ’Todos los días un plomero del municipio se encarga de reparar los daños para hacer funcionar el servicio. Los fines de semana, como no trabaja, tenemos que regar la zona parquizada con el tanque’, dijo el intendente Castro quien agregó que hasta que no se resuelva cómo mantener a salvo del vandalismo el sistema de riego, no se continuará parquizando unos 800 metros más del costado Oeste de la calle Nacional ni se comenzará a parquizar el costado Este de la misma.

El funcionario agregó que la Policía Comunal hace rondas por esa zona hasta las 2,30 de la madrugada y que después lo hace un móvil policial de la Comisaría 20ma del departamento.

Pero no sólo el sistema de riego es víctima del vandalismo en esta obra. El césped y los canteros también. Así lo dijo Gladys Bravo, una vecina, que ayer decidió colocar ramas de espinas sobre el césped frente a su casa para protegerlo. ’Me he cansado de decirle a los muchachones que no anden en bicicleta o en moto por encima del pasto porque se va a secar. Pero, me dicen palabrotas y lo hacen igual. También, por diversión han arrancado las plantas que el municipio puso en los canteros. Es una vergüenza’, dijo la mujer.