Después de la intervención de la Policía que montó un operativo con la Guardia de Infantería incluida ayer cerca de las 15, los agremiados de SOEME que mantenían bloqueados los 5 accesos al campus de la Universidad Católica de Cuyo en Rivadavia, se retiraron hacia los costados para dejar entrar y salir a personas y vehículos.

Esto sucedió luego de que los gremialistas fueron notificados de una orden judicial que los intimó a ‘desalojar‘ la entrada al establecimiento. Fue después que realizaran un piquete durante casi dos días en la puerta de la escuela y que ocasionó problemas con el tráfico. Por esto las autoridades escolares decidieron suspender las clases.

‘Vamos a quedarnos a un costado hasta que nos den una respuesta de designar un miembro universitario ante la paritaria nacional‘, dijo Eduardo Servera, secretario de Organización del gremio que nuclea a los obreros y empleados de la minoridad y la educación.

La medida de fuerza comenzó el martes, cuando un grupo de empleados de maestranza junto a sindicalistas, cortaron la Ignacio de la Roza entre Rastreador Calívar y Meglioli, impidiendo la entrada de vehículos al campus. Así, los padres y choferes de transportes escolares tuvieron que retirar a los alumnos caminando y llevarlos hasta el camping del Banco Nación, donde habían dejado las movilidades estacionadas.

El inconveniente obligó a las autoridades de la UCC a suspender las clases ayer y hoy, en las tres escuelas, Nuestra Señora de Tulum, Monseñor Audino Rodríguez y Olmos e Instituto Santa María. Es decir que los alumnos retornarán a clases recién a partir del lunes.

La medida no incluyó al nivel universitario. Sin embargo, varios alumnos que concurrieron ayer a rendir exámenes finales, tuvieron que esperar hasta que la Policía persuadiera a los huelguistas de liberar los portones.

Marcelo Pintos y Javier Vera, vicepresidente del Consejo Directivo y decano de la Facultad de Derecho de la UCC, respectivamente, dijo que habían hecho la exposición policial para dar intervención a la justicia y liberar el acceso al predio.

Afirmaron no haber dialogado con los representantes gremiales sobre el motivo de la protesta ni haber recibido ningún reclamo por escrito sobre los pedidos que dieron lugar al corte de calle primero y al bloqueo, después.