El denominado ‘avalúo fiscal‘ es el precio que fija el Estado como base en terrenos, casas y edificios, para calcular el 0,75% del impuesto Inmobiliario que recauda la Dirección General de Rentas de la provincia. Generalmente el avalúo fiscal es inferior al avalúo comercial. El del 2015 será el décimo aumento que se aplica a la valuación de propiedades en la provincia, desde la devaluación.