El fuerte viento zonda que azotó durante todo el partido, pero que tuvo sus mayores ráfagas en el segundo tiempo, produjo que varias de las maderas que componen la estructura de las luminarias del sector de plateas se desprendieran e hirieran a un hincha fuertemente en su cabeza y una mujer recibió un golpe en su espalda, de otra de las más de 10 maderas que cayeron desde 25 metros de altura sobre la gente, que debió abandonar ese sector de plateas.