Cuando tenía 18 años sorprendió al mundo ciclístico ganando por primera vez la Persecución, en Esperanza, Santa Fe. A los 19, en 1994 repitió en Mendoza. Desde entonces, Walter Pérez había intentando en algunas ocasiones revalidar esos logros y no había podido. Edgardo Simon con récord incluido- lo batió en Mendoza. Ayer después de muchos años sin intentarla- volvió a correr la especialidad y la ganó de forma brillante, dando caza a dos rivales de fuste, como el sanjuanino Jorge Pí y el juninense Sebastián Cancio.

“Estoy contento porque pude rendir a pleno. Creo que estoy en un buen momento y eso se nota en la pista”, explicó mientras se preparaba para correr el Scratch.

Consultado sobre cuánto pesa la experiencia en estas pruebas, el bonarense, dijo que “es clave”. “Al estar más maduro uno regula mejor las energías y puede elegir los momentos para atacar”.

Verlo deslizarse con su bicicleta por el velódromo “Julio Polet” fue una maravilla. Ganó dos medallas doradas en el primer día de competencias y no cabe duda que hay que anotarlo entre los candidatos a ganar hoy las Vueltas puntuables y la Madison de mañana, en la que conformará la pareja de la Selección Argentina con Sebastián Donadio.