Un llamado ingresó al CISEM 911 alrededor de las 14 horas alertando sobre la presencia de una bomba en el Centro Cívico, lo que obligó a las autoridades a aplicar el protocolo de evacuación de todo el personal de la administración y el público que se encontraba en el lugar.

A la vez, personal de Bomberos de la Policía de San Juan, en particular los especialistas en explosivos, ingresaron al edificio y empezaron a buscar el supuesto aparato al que hizo referencia el llamado anónimo.

En lo que va del año esta es la séptima ocasión en que debe aplicarse el protocolo de evacuación en el Centro Cívico, muchas de ellas ocurridas durante la siesta de un día viernes. Esto sin contar las múltiples amenazas en escuelas y otros sitios públicos, lo que se convirtió en un problema para el Gobierno.

Tanto así que a mediados de septiembre, y después de varios procesos judiciales contra menores y mayores de edad a los que se les probó ser autores de llamados con amenazas que terminaron ser falsas, Fiscalía de Estado empezó a promover demandas civiles por daños y perjuicios contra quienes resultaran responsables de los llamados.

Sin embargo, ni siquiera este tipo de acciones lograron frenar los llamados sobre presuntas bombas en escuelas y edificios públicos.