1- Definición. El grooming es la violencia sexual a niñas, niños y adolescentes a través de medios digitales, consistente en acciones realizadas por personas adultas que se hacen pasar por menores, con intenciones de establecer contacto con fines sexuales con los menores.

2- Características. El grooming incluye una serie de conductas deliberadamente emprendidas por la persona mayor con el objetivo de contactar al menor y así ganarse su confianza para luego generar un encuentro personal o para obtener el material de contenido sexual por parte de la víctima para su comercialización, distribución o para satisfacer su perversidad sexual.

3- Contacto Inicial. Los videojuegos en línea se convirtieron en uno de las principales vías que usan los groomer para contactar a los menores y para entablar una conversación con ellos. Plataformas populares entre los niños como Roblox y Free Fire son las principales vías del contacto inicial entre el groomer y su víctima.

4- Táctica 1. Generación de confianza. El abusador crea un perfil falso. Se hace pasar por un par, adapta su lenguaje, simula intereses comunes y se muestra como un amigo. Para esta táctica utiliza información que los menores difunden a través de las redes sociales o le ‘dan me gusta’ a un video de Tiktok difundido por su posible víctima.

5- Táctica 2. Acoso sexual. El groomer sexualiza la conversación con su víctima. Le pide al menor fotos íntimas, videos privados y contacto personal. El menor debe comprender que ningún adulto le puede pedir ni exigir contenido de este tipo. Esta etapa se caracteriza por una marcada agresión sexual, implícita o explícita.

6- Táctica 3. Chantaje y extorsión. El acosador amenaza al menor con difundir el material privado que le envió (foto íntimas, videos privados), contactar a sus familiares o exponerlo públicamente. En aquellos casos en los cuales el menor no acceda a sus requerimientos, el acosador ejercerá el chantaje, extorsión, amenazas o coacciones.

7- Rol del adulto. Dialogar abiertamente con el menor sobre su vida digital y sin juzgar; formarse en el mundo digital para poder guiar mejor; vigilar el uso que el menor hace del dispositivo y controlar el tiempo de conexión. No revisar a escondidas sus cuentas, ya que la confianza es fundamental.

8- Señales de alerta. Estar atentos a los compartimientos y actitudes de los niños como a un notable aumento o disminución en el uso de los dispositivos; si muestra respuestas emocionales (risa, enojo, disgusto) a lo que ocurre en la pantalla; si oculta la pantalla cuando un adulto está cerca; si evita situaciones sociales que disfrutaba anteriormente; si se vuelve retraído o se deprime, o si pierde interés en las personas y actividad.

9- Medidas técnicas de prevención. Es importante que los padres  se capaciten en las técnicas y herramientas disponibles para configurar los controles parentales y los filtros de seguridad en los dispositivos y aplicaciones que utilizan los menores. Es fundamental conocer con quiénes interactúan los chicos.

10- Denuncia de casos. Ante un caso de este delito NO borrar las conversaciones, ya que son evidencia; hacer captura de pantalla de todo el material; bloquear al acosador; hacer la denuncia llamado al 911 o al 134 o de manera presencial en ANIVI (Centro Judicial de Abordaje Integral de Niños, Niñas y Adolescentes Víctimas) que se encuentra en Avenida Córdoba, entre Jujuy y Aberastain.