En julio de este año, a Micaela González (5) le diagnosticaron un tumor inoperable en el tronco encefálico, una condición grave que la mantenía en cama y cuya esperanza de vida era escasa. Sin embargo, en un giro inesperado, los médicos se sorprendieron al observar que el tumor, que antes se extendía como una tela de araña, comenzó a desaparecer. Hoy, la pequeña sanjuanina está casi completamente recuperada, y su familia atribuye este prodigioso avance a la intercesión de San Carlo Acutis, un joven italiano beatificado en 2020.
Micaela fue sometida a un tratamiento de radioterapia y corticoides en el Hospital Juan P. Garrahan de Buenos Aires, pero lo que sorprendió tanto a su familia como a los profesionales médicos fue la rápida y extraordinaria mejoría de su salud. “De la primera a la última resonancia, el cambio fue impresionante. El tumor ya está casi completamente eliminado”, comentó su madre, Samantha Sánchez, visiblemente emocionada.
La niña, que en su diagnóstico inicial tenía apenas seis meses de vida, ahora está completamente activa, volviendo a su rutina escolar y disfrutando de la vida. La oncóloga que la trató también se mostró sorprendida ante el sorprendente giro en su recuperación, señalando que superó todas las expectativas.
Durante todo el proceso, la familia de Micaela se aferró a la fe. Su madre, aunque no es una practicante constante, comenzó a invocar a San Carlo Acutis, especialmente después de la canonización del joven santo en septiembre de este año. En los momentos más oscuros, el apoyo de la comunidad religiosa y las oraciones por la niña se multiplicaron. Samantha relató que Micaela le decía constantemente: “Carlo Acutis me llamó del cielo”, asegurando que el santo fue quien le dio la fuerza para sanar.
El fenómeno de San Carlo Acutis está ganando cada vez más seguidores, especialmente en Argentina, donde su figura se ha consolidado como un símbolo de fe moderna. En Mendoza, por ejemplo, ya se está construyendo una moderna capilla en su honor, que se espera sea un importante centro de peregrinación para jóvenes de todo el mundo.
San Carlo, quien murió en 2006 a la edad de 15 años, dedicó su vida a difundir el mensaje cristiano en internet, creando contenidos sobre la Virgen María y documentando milagros eucarísticos. Su beatificación fue un momento de gran significado para muchos, y hoy, como “influencer de Dios”, sigue siendo una figura central en la vida de muchos devotos.
El milagro de Micaela ha tocado el corazón de muchas personas, que siguen su caso con asombro y esperanza. “Esto es un milagro”, dice Samantha. Agradecida por el apoyo de su comunidad y de los devotos de San Carlo Acutis, la familia se siente renovada en su fe y esperanza.
El Arzobispado de Mendoza también se ha mostrado convencido de que la intercesión de San Carlo Acutis jugó un papel crucial en la recuperación de la niña. Según el sacerdote Osvaldo Scandura, “es algo extraordinario” y se considera un regalo de la fe.
Hoy, Micaela sigue su tratamiento médico y, aunque su salud sigue siendo monitoreada, su familia no puede dejar de agradecer a los santos, ángeles y arcángeles que intercedieron por ella. Como consejo, Samantha anima a aquellos que atraviesan situaciones similares a aferrarse a la figura de Carlo Acutis, cuya fe y devoción continúan cambiando vidas en todo el mundo.