La importancia del contacto con el otro

  • Privilegiar las emociones


Silvana Bellotti asegura que desde la escuela se deben privilegiar las emociones y lograr un equilibrio con el aprendizaje, ya que si el niño no está tranquilo o emocionalmente bien es muy difícil que se abra al área intelectual. La profesional es magíster en Psicología, terapeuta Gestáltica, investigadora y docente en la Universidad Católica de Cuyo, vicepresidenta de la Asociación Gestáltica de San Juan (Mat: 446), y su trabajo cotidiano es atender la problemática de los más chiquitos. 


 -A juzgar por tu experiencia ¿cuáles serán las huellas psicológicas que dejará la pandemia en los chicos?
He notado que las peleas de mamá y papá, y la violencia que se vive en casa es una de las grandes preocupaciones de los chicos en estos tiempos de pandemia. Ellos dicen que la cuarentena está separando a los papás. Sin dudas, hay muchas familias atravesando por difíciles procesos. En cuanto a las huellas psicológicas que puede dejar el encierro, la más preocupante es no ir elaborando en el presente lo que se va viviendo y que luego se desarrolle un estrés postraumático. Es decir que al no quedar cerrada la situación, en un futuro puede afectar psicológicamente a los chicos.


-¿Cómo incide en los niños la educación virtual que debieron asumir de forma repentina? ¿Afecta mucho la falta de contacto con sus pares?
Muchos de los chicos expresan que fue un alivio no ir a la escuela, pero después les costó mucho este cambio tan repentino a la educación virtual. Los docentes han hecho un gran esfuerzo para manejar la virtualidad ya que si bien puede ser la opción del presente con muchos beneficios, carece de la emocionalidad. El contacto es algo muy importante para los seres humanos, la presencia física, el vernos, el tocarnos, el poder escucharnos. Yo creo que después vamos a tener que trabajar mucho como terapeutas y a nivel familiar, el encuentro y el contacto que es una parte esencial del ser humano. Por mi experiencia puedo decir que en la escuela se están privilegiando las emociones y tratando de lograr un equilibrio con el aprendizaje porque si el niño no está tranquilo o emocionalmente bien es muy difícil que se abra al área intelectual. En este sentido hay que atender a lo emocional del niño, esperarlo, acompañarlo porque hay chicos que tienen procesos diferentes en cuanto a acomodarse a esta virtualidad. Los aprendizajes se irán incorporando de alguna manera, para lo cual hay que seguir buscando modos y canales para vincularse desde lo virtual lo más afectivamente posible. Una experiencia que puedo contar es de una niña de segundo grado que no quiere hacer ninguna tarea porque la mamá no es la maestra, y está cerrada para todo aprendizaje. Le hice una videollamada para charlar y ahí me explicó que no entendía los contenidos de matemáticas ni de lengua, y quería que la seño le explicara. Así fuimos hablando sobre la realidad, que no podíamos estar en contacto y que había que tener paciencia. Ella fue aceptando todo y haciendo el intento para que mamá la ayudara. Hay que estar muy atentos a esto, y cuidar a los chicos desde lo emocional, por eso elabore un escrito al comienzo de la cuarentena para que los papás tengan en cuenta (Ver recuadro aparte). En primer lugar, como adultos y aprovechando el Día del Niño, deberíamos revisarnos como estamos nosotros mismos, porque papas tranquilos que van tomando conciencia de sus emociones, de sus preocupaciones tratando de manejarse lo más saludablemente posible-, podemos acompañar a los niños desde la salud. También como papás revisar un poco el comportamiento del niño interior que todos tenemos que puede tener heridas o dificultades ya que si no lo vemos desde la conciencia, transmitimos eso a nuestros hijos.


-¿Cuáles son los aspectos fundamentales para hablar con los chicos en este contexto?
Es muy importante explicarles la realidad en la medida que ellos necesiten saber porque mucha información puede angustiar al niño, y poca información lo hace fantasear, ya que lo que no es explicado por los papás pasa a la fantasía. Una técnica útil para esto es la repregunta para ver que necesita saber y hasta donde. Otro tema a tratar son los miedos. Lo bueno es que lo pongan en palabras porque ellos tienen más miedos de lo que los adultos creemos. Otra forma de acompañar es permitir más el uso de la tecnología, pero con la presencia del adulto, para controlar y ayudarlos a discriminar que está bien y qué no.


También hay que ayudarlos a vivir en el presente, lo que no significa no proyectar un futuro, si no que es tratar de disfrutar lo que la vida me ofrece aquí y ahora, con una actitud positiva en lo que va a venir que puede ser mejor. 


-¿Qué mensaje le darías a los padres?
Que nos ocupemos de nuestros niños con una mirada positiva y que desarrollemos en ellos la resiliencia, que es -como dice Edith Grotberg-, la capacidad del ser humano para hacer frente a las adversidades de la vida, superarlas y ser transformado positivamente por ellas. Es decir que todo esto les sirva a los chicos para hacer cosas hermosas en el futuro, en el desarrollo de la humanidad. Es un momento para acompañar, para fortalecerlos, para que después sean adultos con experiencias de vida más satisfactorias a partir de lo vivido.

>> Para tener en cuenta


Silvana Bellotti elaboró un mensaje para padres, digno de tener presente en estos tiempos.


" Vivimos un momento difícil, de incertidumbre y miedos. Como terapeuta, les pido a los papás que cuidemos mucho a los niños en estos momentos. Ya que ellos elaboran sus propias teorías de lo que van viviendo, y muchas veces son muy angustiantes que la realidad. También ellos tienen más miedos de los que creemos los adultos. Por eso es importante no negarles la realidad sino explicarla en la medida de lo que ellos necesiten saber", indica la especialista. Aquí los puntos a tener en cuenta:

  • Demasiada información puede angustiar. Usar la técnica de la repregunta, es decir preguntarles qué necesitan saber de lo que nos están diciendo.
  • Ayudarlos a vivir el presente. Tratar de disfrutar las pequeñas cosas que nos suceden ahora. 
  • Lo único seguro es el presente.
  • ¡Escucharlos! Para ayudarles a rectificar sus fantasías.
  • Ellos leen nuestro corazón. No negarles nuestras emociones.
  • Tratar de mostrarles tranquilidad y esperanza. ¡Son niños! Descubren que la vida es difícil, pero le demos herramientas para vivir con fortaleza cada situación.
  • No hay causa que merezca más alta prioridad que la protección y el desarrollo del niño, de quien dependen la supervivencia, la estabilidad y el progreso de todas las naciones y, de hecho, de la civilización humana (Plan de acción de la Cumbre Mundial a favor de la Infancia).