La nueva comisión directiva del tradicional Club Social lanzó un programa de trabajo para reflotar las actividades que contempla el estatuto. Así es que ya está en funcionamiento desde hace dos semanas la cantina con atención desde las 9 hasta la medianoche, donde se realizó después de 20 años un almuerzo familiar entre los socios.
Tristán Yanzón Sánchez (presidente); Mariano Olguín (vice); Eduardo González Villanueva (secretario); Humberto Plana Más (tesorero); Juan Pringles; Diego Coll y Guillermo Olguín, entre los vocales son los encargados de llevar adelante esta apuesta que pretende fomentar el espíritu de la entidad.
El Club Social fue creado el 31 de marzo de 1888, lo que que lo constituye en un sobreviviente del terremoto del 44, y que ha cobrado valor a lo largo de sus más de 100 años de vida gracias a la actividad social.
En apenas un mes y medio de gestión, la actual comisión decidió retomar las fiestas del 25 de Mayo y 9 de Julio, por lo que para esta última se realizará la noche de gala el día 8 que culminará con un baile.
"Desarrollaremos actividades culturales en todas sus manifestaciones, desde conciertos, conferencias, exposiciones de pinturas, entre otros, para lo cual se ha empezado a armar una comisión que se encargará de ponerlo en marcha. En el orden social volveremos a realizar las fiestas que indica el estatuto", dice Eduardo González Villanueva, secretario de la comisión.
Otra de las apuestas que también están vinculadas al espíritu del Club es la reactivación del gimnasio equipado con aparatología de última generación y el conocido baño sauna.
Actualmente cuenta con unos 100 socios activos y otros 50 vitalicios, pero un dato de trascendencia es que en el último mes se ha lanzado un período de captación de nuevos asociados logrando la incorporación de 30 miembros más.
Para alcanzar esta categoría, los interesados deben ser presentados por dos socios activos, cumplir con los requisitos del estatuto, para que finalmente la incorporación sea tratada en comisión.
La cantina, que es otro de los íconos del lugar, fue habilitada hace dos semanas con horario extendido y servicio de cafetería y minutas, como así también de servicio gastronómico solicitado con antelación para reuniones especiales.
El gran encuentro fue el domingo último ya que después de más de 20 años no se realizaban estas reuniones familiares en la cantina atendida por Guillermo Palacios.
También se están llevando a cabo tareas de mantenimiento para poner en valor un patrimonio cultural de la provincia y retomar todas aquellas actividades que por años han sido la esencia de esta institución.