Octubre es el mes en que estalla de flores, se trata del Rosedal ubicado entre el Banco San Juan y La Catedral. Es un pequeño paseo donde converge en plena armonía dos mundos el espiritual y material. Este nació por iniciativa del Ing. Enrique Ezkenazi, amante de las rosas, en el año 2014 y se concretó en el 2015. La obra de cultivo lo realizó la Sra. Valentina Casucci, Paisajista y Rosicultora de la Asociación Argentina de Rosicultura de Buenos Aires, gran amiga del Ing. Enrique Ezkenazi. Hoy Valentina descansa en paz. El Vivero Regalería Verde, es quien hizo el trabajo de colocar y preparar la tierra y plantar los rosales. Inicialmente se plantaron 800 rosales en la actualidad cuenta con 640 plantas de rosas. Sin lugar a dudas este espacio le dio vida a un sitio complicado por las horas de sol que requieren estas especies y además por estar entre dos estructuras muy grandes. 

El Rosedal representa al Banco San Juan y a través de él a la comunidad que sirve y de la que forma parte. 

Desde el mes de octubre es inevitable no ver el estallido y profusión de rosas y dejarse embelesar por sus aromas, cualquier persona que pase por allí provoca una admiración ante semejante belleza. El canto de los pájaros y el agua de la fuente acompañan ese paseo de una manera relajante y agradable para todos los sentidos. 

Este espacio cuenta con rosales de muchas variedades, siendo las más destacadas los ingleses de David Austin, destacándose algunos como, Golden Celebration, The Prince, Winchester Catedral, Abraham Derby, Liliam Morwis, entre otras

También hay rosales franceses de Meilland, del costado de la Catedral, estas plantas son de gran tamaño, entre algunas de ellas son: Caprice de Meilland de color fucsia, Elina y Marcel Pagnoll.

El mantenimiento del rosedal hoy es responsabilidad de la Gerencia de Recursos Materiales y quienes llevan adelante el mantenimiento de las rosas son los jardineros Sres. Sergio Poblete y Rolando Izquierdo y el mantenimiento de las fuentes y riego está a cargo de la empresa Ing. Julio Nacusi Construcciones.

La escultura que acompaña el Rosedal

El Ramo

La escultura que acompaña al rosedal, es obra de María Beatriz Dorgan. Esta simboliza una ofrenda al quehacer cotidiano y místico del ser humano.

Esta realizada íntegramente en mármol de carrara, tanto el material como la técnica elegidos constituyen un homenaje a los inmigrantes que hicieron crecer la provincia de San juan.

Emergiendo como un puente entre el pasado y el presente. Contemplarla no solo nos trae a la memoria a Beatriz Dorgan, sus obras, su pasión por el arte y la satisfacción de un trabajo muy bien logrado. Ella estará presente hoy y siempre en medio de un paseo que es un deleite para el ojo humano.