¿Qué significa el diseño de interiores?
Es importante no confundir diseño con decoración, ya que el diseño interior indaga mucho más allá de la estética de un ambiente, enfocándose en brindar confortabilidad y funcionalidad en el espacio interior sin perder de vista la esencia del propietario. Por otro lado vale aclarar que el diseño de interiores es una carrera universitaria que forma a profesionales idóneos para interpretar las necesidades habitacionales del cliente y proyectar desde la ergonomía, el estudio de materiales, la psicología y el dibujo como medio interpretativo entre otros.
¿Para qué sirve llamar a un diseñador?
Principalmente para que, adecuándose a nuestros hábitos cotidianos dentro del espacio a desarrollar, pueda proyectar un diseño adecuado a cada uno según su estilo de vida, edad, discapacidades o preferencias y así crear un espacio que dé sensación de pertenencia, un lugar agradable en donde nos sintamos cómodos y podamos disfrutar de cada ambiente desde el orden y la estética.
¿Cuándo es el momento apropiado para llamarlo?
El momento más propicio para que aparezca el diseñador de interiores es en cuanto el arquitecto entrega el proyecto, esto sirve para que el diseñador proyecte el interior del espacio, es decir pueda planear el mobiliario, revise los flujos de tránsito, la cantidad de tomas (puntos de encendido y enchufes) y su ubicación, encuentre la forma de aprovechar el lugar y su finalidad. Muchas veces revisando el proyecto nos damos cuenta que a pesar de estar conformes con él, no se adapta a nuestro estilo de vida, ya sea porque éste representa un gasto de mantenimiento muy alto, por ejemplo grandes ventanales que deben ser limpiados por una empresa de limpieza, tal vez porque cuenta con desniveles y en nuestra familia tenemos algún integrante con discapacidad motora o simplemente porque es muy formal para el estilo de vida de una familia promedio con chicos en edad escolar y visitas permanentes. Por todo esto, es que es importante que un diseñador evalúe cada detalle del proyecto antes de tomar la decisión de ejecutarlo.
¿Significa algún tipo de ahorro?
Si, claramente. Si bien los honorarios de un diseñador de interiores no son tan económicos, estos son totalmente absorbidos con el ahorro que representa tener el proyecto final, reduciendo a una mínima expresión las "prueba y error", las reparaciones no planeadas o los gastos innecesarios, los cuales significan tiempo, mano de obra y material. Un ejemplo claro es cuando nos damos cuenta de que necesitamos más cajas de luz, entonces; ya habitando el espacio, deben entrar en nuestra casa albañiles, electricistas y pintores a reparar ese error, los cuales representan no sólo una incomodidad sino también un gasto que no teníamos contemplado.
El diseño de interiores en nuestra provincia, ¿merece un apartado especial?
Sin dudas. Al margen de que puntualmente el diseño de interiores es un concepto nuevo, para nuestra sociedad conservadora y reticente al cambio, significa un gasto compensatorio al fin. Es notable cómo en otras áreas la gente consume permanentemente diseño, muchas veces sin percibirlo. Es un hecho que todo lo que nos rodea entra "por los ojos" pero una vez que adquirimos tal o cual objeto de diseño nuestras expectativas suben esperando que además, sea funcional. Así es como sin darnos cuenta poco a poco vamos seleccionando objetos (desde un exprimidor de jugos hasta un sillón) de forma más selectiva, ya que hoy le exigimos al diseño además de estética, funcionalidad. La respuesta del sanjuanino que llama a un diseñador es muy buena, luego de comprender la importancia de la confortabilidad comienzan a valorar; y a adoptar; esos "pequeños detalles" que ayudan a transitar de forma más cómoda y agradable nuestros días.
¿Cómo funciona el diseño interior en otras partes del mundo?
En países del primer mundo, como se los suele definir, el diseño interior es tomado como un ítem más a la hora de encarar un nuevo proyecto, muchas veces inclusive se arranca desde las necesidades del interior para proyectar el espacio que lo contendrá. Los profesionales del área son llamados interioristas y por lo general trabajan simultáneamente desde el inicio del proyecto con el arquitecto y calculista encargados de éste.
¿El diseño de interiores es sólo para casas?
No. El diseño de interiores es muy requerido en el área comercial e institucional, inclusive es en donde todos estamos acostumbrados a verlo y en muchos casos a exigirlo y pagar por él. No sólo cumple un papel fundamental, sino que también es rotativo, ya que pasa a ser parte del atractivo del lugar y es uno de los recursos principales para incrementar sus ganancias y sumar nuevos clientes. El ejemplo más contundente es el de un hotel que sube o baja de categoría dependiendo de los servicios y estilo que brinde. Lo mismo ocurre en clínicas, bares, locales comerciales, restaurantes, empresas, etc.
¿Vale la pena tener en cuenta la opinión de un diseñador?
Hoy la vida cambió, y con ella la forma de vivirla. Es importante sacarnos ciertos prejuicios de la cabeza y comenzar a sentir nuestras casas como un espacio de descanso, en donde se desarrolla la vida familiar y social, lejos del trabajo y las formalidades. Muchas veces para lograr ese cambio de paradigma necesitamos un profesional que nos oriente y nos proponga una forma más relajada y práctica de vivir sin perder el estilo.