Existen destinos tradicionales para visitar en distintos puntos del país. Más aún si es para Semana Santa. Pero, también hay otros sitios que además de sus atractivos naturales, muestran actividades especiales que tienen que ver con la fecha. Este es el caso del Vía Crucis Submarino, que se lleva a cabo este 26 y 27 de marzo, en Puerto Madryn, Capital Nacional del Buceo. Una verdadera experiencia religiosa.

La actividad está prevista para que un sacerdote recorra las estaciones escoltado por varias decenas de buzos en una expresión de fe única en el mundo.

En Puerto Madryn se plantearon el dilema a la hora de mostrar una actividad religiosa original. Pudieron resolverlo aplicando su creatividad: un Vía Crucis submarino. Esta actividad de gran convocatoria en el sur argentino, no pierde la solemnidad religiosa y permite disfrutar del entorno privilegiado de la ciudad chubutense en un marco de preparación para la Pascua.

De las catorce estaciones, doce se recorren debajo del agua, en una trayectoria de 500 metros, mientras que las últimas dos estaciones se realizan en superficie. Estas están constituidas por imágenes plastificadas y colocadas sobre una superficie de madera laqueada capaz de resistir la inmersión en el mar. El sacerdote Juan Gabriel Arias, de la Parroquia Natividad de María Santísima, será escoltado bajo el agua por buzos con bengalas submarinas hasta culminar la ceremonia portando la cruz hacia la orilla.

Quienes acompañen a la Cruz desde la superficie, también tendrán las respectivas estaciones sobre las barandas, y podrán seguirlas con velas y antorchas. Las comunidades de las parroquias de la ciudad y el coro estable municipal serán los encargados de la interpretación coral y las reflexiones en cada imagen.

La logística está a cargo de Manuel Savio, José María Goity y Ricardo Orri, quienes construyeron la campana de inmersión en la que el sacerdote se sumerge para guiar la procesión. En su interior tiene un sistema de radio que permite transmitir la ceremonia a los fieles reunidos dentro y fuera del agua. "Le acercamos la propuesta al padre Gabriel en el año 2000, y él aceptó enseguida, previa consulta y aprobación de la Iglesia Católica. Tuvo que hacer el curso de buzo en tiempo récord", recuerda Manuel Savio. Año a año fueron sumando pequeños detalles que suman atractivo, por ejemplo, velas que pueden estar encendidas debajo del agua.

"La única exigencia para participar en la inmersión es ser buzo matriculado. Nuestros guías expertos conducen los grupos. Hemos tenido hasta treinta profesionales, pero este año esperamos superar ampliamente ese número, sobre todo teniendo en cuenta que este año el Vía Crucis se realizará cuando baja el sol", comenta Savio. La actividad es promocionada por la Secretaría de Turismo de Puerto Madryn y las operadoras de buceo, bajo la supervisión de la Prefectura Naval Argentina.

La actividad comenzará a las 19 horas, en el muelle de cruceros "Luis Piedra Buena", cuando la costanera se verá iluminada especialmente para la celebración. Los buzos que participen de cada una de las estaciones utilizarán bengalas que se mantienen prendidas durante una hora, simulando antorchas, y creando un clima de intimidad único. Cada estación se irá iluminando al paso de la procesión.

Savio agrega: "Si bien Aquavida es un proyecto turístico, en este tiempo especial relegamos nuestro protagonismo para privilegiar la fe de nuestra comunidad. Quisimos hacer un Vía Crucis distinto para recuperar el sentido religioso. Ha tenido muy buena aceptación desde el principio, en el año 2000, no sólo de las comunidades parroquiales sino también en el ambiente del buceo y en los viajeros que nos visitan de toda la Argentina y el mundo".

(Informe especial para Revista ¡OH!: Florencia Tapia Gómez, de prensa y Relaciones Institucionales Iggy y Secretaría deTurismo de Puerto Madryn).