La Costa Atlántica indudablemente ofrece opciones para todos los gustos y bolsillos. Eso sí, siempre con paisajes que no dejan de sorprender y propuestas muy atractivas. Una de estas alternativas, muy elegida por las familias que prefieren un poco más de tranquilidad, es Necochea. Allí no sólo se puede disfrutar de arena, sol y mar sino también bosques en los que se puede observar flora y fauna del lugar, e inclusive hacer senderismo o cicloturismo. Esto sin contar que también se puede disfrutar de las agitadas aguas del río Quequén-Salado.
El clima del lugar es templado húmedo, durante el verano las temperaturas oscilan entre los 14 y los 33ºC. Otra de las características es que si bien cuenta con un relieve llano, a lo largo de la costa marítima se extiende una ancha franja medanosa ideal para realizar travesías en vehículos 4×4.
Claro está que su principal atractivo es la playa. Costa Bonita, Bahía de los Vientos, Las Grutas, Playas de Quequén, Playas del Centro, el faro Quequén y los interesantes restos fósiles de Punta Caballido se encuentran entre los sitios más recomendados.
Otro punto importante es el puerto de Necochea, donde se desarrolla una intensa actividad comercial.
En Necochea se pueden practicar deportes náuticos como windsurf, surf, jet ski, vela, buceo, remo o natación, como así también visitar los museos Histórico Regional y Bromatológico Dr. Squadrone.
Puro verde
Uno de los lugares imperdibles es el Parque Miguel Lillo. Este sitio posee frondosas y exóticas arboledas ideales para realizar observación de flora y fauna, senderismo o cicloturismo. Cuenta con un anfiteatro al aire libre, una plaza y dos museos.
Es una reserva forestal de 640 hectáreas paralelas a la costa y por sus características es único en el país. Existe un circuito aeróbico, gran variedad de fogones al aire libre, proveeduría, cancha de bochas, alquiler de caballos, bicicletas y carritos, entre otras.
En este pulmón verde hay más de 1 millón de árboles, de los cuales la mayor parte son coníferas, con más de 100 años de historia donde se pueden encontrar importantes ejemplares de eucaliptos y pinos.
Allí se realiza el Festival Infantil, una de las celebraciones veraniegas más importantes de la ciudad junto a la Fiesta de las Colectividades.
El anfiteatro tiene una capacidad para casi 1500 personas, y en su escenario han dado conciertos importantes artistas de la Argentina.
Muy cerca del Parque se encuentra el Museo de Ciencias Naturales e Histórico Regional en lo que fuera la casona edificada por doña Carmen Díaz Vélez de Álvarez de Toledo, de típico estilo neocolonial.
Allí también se encuentra el Lago de los Cisnes, un reservorio artificial ubicado sobre la avenida 2, a pocos metros de la intersección con avenida 103. Recibe ese nombre debido a la gran cantidad de cisnes y patos que habitan en sus aguas.
Se pueden alquilar bicicletas acuáticas, para recorrer el lago; o caminar por sus senderos bordeándolo. En su mini zoológico, se pueden observar algunos especímenes de cabras, ñandúes, faisanes, entre otros.