Uno de los lazos más fuertes que existen entre Argentina y Chile es la historia que comparten en relación al "Cruce de los Andes" o "Cruce Sanmartiniano". Esta monumental epopeya reivindica de manera ininterrumpida, desde 2005, la gran hazaña realizada por Don José de San Martín en pos de la autonomía y liberación de los pueblos del continente sudamericano. El viaje que se realiza anualmente en el mes de febrero es un homenaje al Padre de la Patria, por su labor en la integración de ambos países. Dos grandes caravanas de mulas parten desde San Juan y desde Chile, para encontrarse en el corazón de la Cordillera de los Andes y rememorar la batalla de Chacabuco. Antes de que funcionarios, periodistas, personal de Gendarmería, actores, artistas etc. encararan la última travesía cordillerana, el gobernador José Luis Gioja comentó: "Hay que ver la historia que está escrita por testimonios. Habrá hecho otros cruces por Mendoza por supuesto, pero el cruce principal para librar la batalla de Chacabuco que significó el comienzo de la liberación latinoamericana fue por San Juan, por el Pato Sur y fue la gran epopeya sanmartiniana". Atravesando valles, cascadas, volcanes y glaciares, las caravanas de hermanos argentinos y chilenos se reúnen para rendir honor al Padre de la Patria entre vinos, piscos, tonadas y cuecas. En un contexto marcado por el gran compromiso que requiere la integración entre ambos países.
