El jardín es una parte fundamental de nuestra casa, es la carta de presentación del gusto y del estilo de quien habita. Por eso es importante dedicar tiempo y cuidado a la decoración del espacio exterior, una actividad que con los recursos adecuados brinda grandes satisfacciones. Tener un jardín exuberante, lleno de plantas y flores fragantes, quizás embellecido con una fuente o piscina, favorece el bienestar de quienes viven en ella. Si deseas que tu espacio verde se transforme realmente en un pequeño refugio de protección contra la vida frenética cotidiana, lo mejor es apostar por lo armonioso del Feng Shui

  • Una filosofía milenaria

El Feng Shui es una filosofía originaria de China del siglo VI - IV a.C., en cuya base existe un exhaustivo estudio de la forma y de la disposición de cada habitación y de cada elemento de decoración. La armonía que proviene de la correcta organización de los espacios permite que la energía positiva fluya libremente, brindando paz y bienestar a quien vive la casa. Como sucede para el espacio interior, las reglas de este, pueden ser aplicadas a cualquier jardín, siguiendo algunos consejos simples que lo transformarán en el lugar ideal donde transcurrir el propio tiempo.

  • Consejos para una armonía perfecta

La palabra clave que se debe tener en consideración cuando se decide realizar un jardín Feng Shui es "armonía'. De hecho, los elementos que componen nuestro espacio exterior deben combinarse entre sí para dar vida a un perfecto equilibrio de formas, colores y perfumes.

  • La naturaleza como referencia

Estar rodeados por una naturaleza exuberante, caminar por un sendero que bordea un curso de agua o protegerse a la sombra de un árbol, son momentos que ayudan a relajarse y regenerarse. Uno de los principios básicos prevé la combinación armónica de los cinco elementos naturales fundamentales: fuego, agua, tierra, madera y metal. Realizar un jardín en el que estos elementos resulten en equilibrio entre sí permite alcanzar un estado de gran bienestar: por ejemplo, considerando algún elemento de madera, como un sendero, o la presencia de velas en los puntos más sugestivos de tu espacio. Además, sería mejor optar siempre por plantas y flores de estación, quizás organizadas por color y esencia y, si es posible, plantas siemprevivas, símbolo de longevidad. De todos modos, debido a que esta filosofía prevé un jardín florido y exuberante, será preferible elegir plantas que no exijan demasiado cuidado si no se dispone del tiempo necesario para dedicar a su mantenimiento.

  • Cada elemento está en equilibrio

Además de los cinco elementos fundamentales, para realizar un perfecto Feng Shui es necesario recrear también el equilibrio adecuado entre las dos fuerzas dominantes jardines *Yin (el principio femenino) y *Yang (el principio masculino), a través de la disposición, los colores y las formas de los elementos.


Se pueden colocar árboles de tronco alto, ligustros o muros en la parte de atrás de la casa como protección de las energías negativas, mientras que las matas o pequeños arbustos se encuentran en su posición frente a la casa, a fin de favorecer las vistas del jardín. De cualquier manera, todos los elementos naturales, seleccionados de entre muchas variedades, no se colocarán nunca en fila sino distribuidos en posición descentrada, ya que para esta filosofía no sigue ninguna regla rígida de composición.


El agua* es uno de los elementos esenciales y es imprescindible para el equilibrio, puede ser un estanque (que representa el sosiego del Yin) y un pequeño arroyo (que simboliza el movimiento del Yang) permitirá que la energía positiva fluya con mayor libertad, sobre todo si el curso del agua se dirige hacia la fachada de la casa.


Si el entorno de tu espacio exterior lo permite, *los caminos y senderos* probablemente tengan un recorrido irregular y con interrupciones para favorecer un paseo lento y contemplativo que permita disfrutar plenamente el contacto con la naturaleza.


Por último, *las piedras, las estatuas y las campanas tibetanas* son elementos ornamentales que estimulan los sentidos y favorecen un espíritu de serenidad y bienestar.

  • Decorar un jardín Feng Shui

Por tanto, siguiendo los principios de éste, la elección de la decoración también debería realizarse con respeto a la naturaleza. Por ello, se recomienda elegir materiales como la madera, la terracota, la cerámica y el bambú, optando por tonalidades neutras que no contrasten con los colores de la vegetación.


Además, sobre todo en caso de un amplio jardín, es conveniente crear zonas de sombra contemplando la introducción de coberturas debajo de las cuales poder protegerse, para vivir el espacio exterior en plena libertad, todo el año.


Un jardín Feng Shui cuidado y balanceado en sus elementos contribuye al equilibrio estético y al bienestar de las personas y del hogar; de hecho, no solo constituye un espacio para disfrutar al aire libre sino también un panorama relajante y de belleza para admirar cuando estamos dentro de casa. En particular, si se elige utilizar también grandes ventanales corredizos para el espacio exterior, se podrá obtener un único living doméstico, entre espacio interior y exterior, favoreciendo el flujo de energías positivas.