Bien dice la Organización Mundial de la Salud que el miedo, la preocupación y el estrés son respuestas normales en momentos en los que las personas se enfrentan a alguna crisis, más aún en pandemia. Si esto le sucede a cualquier ciudadano es de imaginar como se agrava en quienes trabajan con los enfermos de covid en el día a día. Mucho más allá de la imaginación y tocando terreno certero, un grupo de profesionales realizó una investigación que tuvo como conclusión la necesidad de crear una herramienta para fortalecer la salud mental de los trabajadores vinculados al área en San Juan. Así surgió la idea de una aplicación (app), que será lanzada en apenas unos días destinada a identificar situaciones e intervenir de manera remota, inmediata y permanente. Cada trabajador recibirá un mensaje en su móvil para poder activarla.
Todo comenzó por iniciativa de integrantes del Instituto de Investigaciones en Psicología Básica y Aplicada (IIPBA), de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Católica de Cuyo, a los que luego sumaron esfuerzos profesionales de la programación y el diseño de la Universidad Nacional de San Juan. El resultado fue una conjunción entre tecnología y salud mental aplicada a los tiempos que corren.
Diana Bruno, psicóloga directora del equipo que lleva adelante el proyecto, cuenta que "el año pasado hicimos una investigación sobre el impacto de la pandemia en la salud mental de la población general y nos encontramos que el grupo de personal de salud era el que presentaba mayores indicadores de alteraciones como ansiedad, estado de ánimo y estrés agudo. Así surgió la propuesta de hacer algo para intervenir y que no sólo quedara en un papel. En ese contexto surgió la idea de esta aplicación que se llama Fortaleza Salud que por un lado busca monitorear la salud de todos los trabajadores del área. No son sólo los que tienen título universitario sino todos los que trabajan como auxiliares de la medicina como personal administrativo y de limpieza que están sufriendo las mismas situaciones de estrés".
El primer objetivo de la app es monitorear el estado de salud mental de cada trabajador para lo cual cuenta con una serie de pruebas de screening o cribado (consiste en identificar personas afectadas por una enfermedad o anomalía), muy cortas para que no se torne engorroso contestarlas o sumar tareas a las que ya tienen.
A partir de los resultados se activan banderas de distintos colores. Las rojas incluyen una alarma alta, las naranjas están destinadas a quienes necesitan realizar algún tipo de "ajuste", y la bandera verde se usa para quienes no presentan ningún indicador.
A partir de eso la aplicación selecciona automáticamente -según una ecuación realizada con las respuestas adquiridas-, algunas intervenciones que los psicólogos llaman herramientas. Es decir "mecanismos" que permiten, por ejemplo, manejar la ansiedad para los casos que así lo necesiten, o brindar opciones más saludables para los de bandera verde a modo de prevención de situaciones más complicadas. En definitiva se ofrecerá la herramienta necesaria según el caso particular de quien use la app.
"Tendrán un formato bastante dinámico con videos cortitos de no más de 5 minutos y lecturas interactivas con actividades. La idea es que sea un recurso ameno que se pueda aplicar en los minutos que tengan libres, que lo puedan escuchar cuando regresan a su casa y que se use las veces que cada uno quiera", indica.
En situaciones extremas también se activará una alarma que sonará en un contacto de emergencia que cada persona elige en su perfil de la app. Esa persona de confianza podrá colaborar para activar las herramientas necesarias.
Demás está decir que esta aplicación es preventiva, nunca suplirá la intervención de un profesional en forma presencial, pero sí ofrece a la par, una línea directa para tomar contacto con algún integrante del equipo de psicología.
"El covid nos puso en jaque. En este proceso los trabajadores de la salud tuvieron que reacomodarse y muchos tuvieron que hacer tareas diferentes, a lo que se le sumó preocupaciones con respecto al contagio de sus propios seres queridos, el contacto con la muerte porque si bien los profesionales de la salud estamos preparados -en cierta medida-, a que es un resultado posible, no en esta magnitud y eso genera una movilización muy compleja", asegura la directora del proyecto avalado y supervisado por el Ministerio de Salud de la provincia y financiado por la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación.
En pocos días será activada para que todos los comprendidos para usar este formato tengan un soporte para cuidar su estado de ánimo, ansiedad, miedo o lo que sea provocado por su alta exposición ante el covid-19.
Los datos ingresados en la app permitirán analizar la relación entre ansiedad, estrés, trastornos del estado de ánimo, tolerancia a la incertidumbre, apoyo social percibido, autoeficacia y calidad de sueño de los profesionales de salud pública de la provincia de San Juan ante el covid-19. Todos los datos son confidenciales.
Profesionales especialistas en salud mental diseñaron la evaluación y las intervenciones y también monitorearán los casos que ameriten un seguimiento personalizado.
Proyecto y Ejecución
El equipo de trabajo dirigido por la doctora en Psicología Diana Bruno pertenece al Instituto de Investigaciones en Psicología Básica y Aplicada (IIPBA), de la Facultad de Filosofía y Humanidades, Universidad Católica de Cuyo. También se sumaron investigadores del Conicet y profesionales de la UNSJ.
Este es el equipo que sumó conocimientos de salud mental y tecnología para lograr la app "Fortaleza Salud: Dra. Mabel Guevara (investigadora IIPBA y psicóloga clínica); Dra. Solange Llarena (investigadora IIPBA y neuropsicóloga clínica); Lic. Luciana Vita (investigadora IIPBA y neuropsicóloga clínica); Lic. Laura Noguera (investigadora IIPBA y neuropsicóloga clínica); Lic. Adrián Acosta (psicólogo clínico); Lic. Agustina Benavídez (investigadora IIPBA y psicóloga clínica); Mag. Laura Pizarro (investigadora IIPBA); Lic. Luis Lucero (investigador IIPBA y psicólogo clínico); Lic. Mariana Zanino (becaria Conicet); Lic. Vanesa Elizondo (becaria Conicet); Rodolfo Rodríguez y Darío Carrizo (programadores) y Aldana Mighetto (diseñadora gráfica).
