Siempre se escucha decir que las comidas preparadas en casa en base a alimentos naturales tienen 
mejor calidad nutricional que las preparadas afuera o que los productos industrializados.Y esto sin duda es así, tanto que se ha convertido en una excelente estrategia para mantener la salud. Claro que no todo el mundo puede darse ese lujo, ya sea por razones laborales, o porque una persona de la casa debe comer distinto al resto por ser hipertenso, diabético, obeso, o por otros motivos. La solución es una vianda que garantice calidad, equilibrio nutricional y se adapte a cada necesidad. Ni hablar si a eso se suma que es "casera". Con ese concepto la licenciada en Nutrición Natalia Páez creó hace 15 años un servicio de viandas personalizadas junto a su mamá, María Susana Sarmiento, que es cocinera. No sólo son "hechas en casa", sino que cada cliente puede ser atendido y asesorado por ella para recibir el menú en su hogar o en su trabajo.

Se podría decir que Natalia comenzó con la preparación de viandas casi por casualidad ya que cuando se recibió en el año 2005, una amiga le planteó si quería tomar la posta para preparar las viandas de su cuñado porque no era lo que ella prefería. Aceptó previa consulta con su mamá que sería la encargada de cocinar. Apenas comenzó el 2006 ya estaban en plena actividad y fue el boca en boca lo que les permitió crecer en este emprendimiento de viandas saludables, caseras y personalizadas."Desde ese momento la premisa fue elaborar comidas naturales y basadas en las necesidades nutricionales de quienes las pedían. En realidad cada vianda es apta para cualquier persona que se quiera alimentar bien porque todo es cocinado al horno, los lácteos son descremados, jamás se usan frituras, y día a día va cambiando el menú. Por ejemplo, los lunes son reparaciones con verduras, los martes con carnes rojas, miércoles pollo, jueves pastas y viernes pescado, siempre cambiando las recetas, no son iguales en cada semana", indica Natalia, quien además de programar cada preparación con su respectiva guarnición se encarga de llevarlas desde Santa Lucía hasta el domicilio de cada cliente entre las 12 y las 14 horas.Todo comienza desde el momento que una nueva persona se comunica con ella para pedir el almuerzo (también puede ser cena, pero llegan ambas al medio día), charla mediante se establece un plan de comidas de acuerdo a la patología que padezca o si, simplemente, quiere estar bien alimentado para conservar su salud.

"La vianda sola no hace magia, si no que según el caso cada persona debe saber que comer el resto del día, ya sea si desea adelgazar o controlar el colesterol porcitar dos ejemplos. Lo importante es saber también que desayunamos, que comemos a media mañana, cuántas comidas hacemos, si tenemos actividad física, si consumimos agua, entre otros aspectos que acompañan el plan nutricional", agrega Natalia.Hay personas que solo aspiran a recibir la comida a diario, mientras que la gran mayoría solicita asesoramiento y controles periódicos cada 15 o 20 días para mejorar su estado general.Una buena alimentación debe incluir aproximadamente un 50 por ciento de hidratos de carbono, un 30 por ciento de proteínas y un 20 de grasas, aunque en cada caso se adapta ya que no es lo mismo un deportista que una persona mayor o con patologías. "Esta distribución es lo que permite que una persona tenga un buen rendimiento en el día y una vida saludable", dice la profesional.Uno de los pedidos más frecuentes son viandas que permitan alimentarse bien y bajar de peso, sobre todo después de la cuarentena. "Tengo que bajar 5 o 6 kilos fue el pedido de mucha gente tras el islamiento, y aún continúa esa demanda, No sólo se nota en el pedido de viandas si no en las consultas diarias", destaca.

Natalia Páez y Mary Sarmiento, a cargo de la organización y elaboración
de las viandas saludables.
Dato


Costo: 350 pesos con envío incluido.
Contacto: 264 472 0993 

El plan ideal

A esta altura mucha gente tomó conciencia que las dietas restrictivas no llevan a buen puerto, todo 
lo contrario, motivo por el cual ahora se habla de planes alimentarios que promuevan el bienestar. Para una buena alimentación diaria, los profesionales de la nutrición aconsejan realizar entre 5 y 6 comidas por día: desayuno,media mañana, almuerzo, merienda, media tarde y cena. Natalia Páez, licenciada en Nutrición aconseja, a modo de ejemplo, el siguiente esquema general. 


* Desayuno: 1 taza de leche descremada con edulcorante, puede ser con café, alguna infusión o sola. Acompañar con 3 o 4 galletas de salvado o 2 tostadas, puede ser con dulce light o queso untable descremado. 

* Media mañana y media tarde: 1 fruta o 1 yogur descremado 

* Almuerzo: carne al horno con verduras (cebolla, pimiento, zanahoria) con ensalada mixta. 

* Cena: revuelto de zapallitos tiernos. Son fáciles de preparar y se puede variar con verduras de estación. (Ver recetas)


Muy saludables

Aquí algunas recetas rápidas, fáciles y super saludables recomendadas por la nutricionista Natalia Páez, para tener en cuenta

Revuelto de zapallitos: Colocar cebolla, zapallitos con agua a rehogar en una sartén. Una vez cocidos se les coloca condimentos o elección, poca sal, un huevo, y se revuelve. Una vez listo se le coloca queso cremoso descremado, se tapa hasta que se derrita. Ideal para una cena liviana, rica y con pocas calorías.


Pastel de zapallo: Una receta para bajar calorías. Reemplazar la papa por zapallo anco. En primer lugar se hierve esta verdura para preparar un puré condimentado a gusto. A la par se prepara carne molida con cebollas picadas con sal y una pizca de pimienta. En una recipiente se coloca primero esta preparación, luego un poco de queso descremado y finalmente el puré de zapallo. Calentar unos minutos y servir.


Milanesas de anquito o berenjenas: cortar el zapallo o las berenjenas (según gusto personal) en rodajas y retirar la cáscara. En un recipiente colocar los huevos con una pizca de sal, pimienta negra y el perejil fresco. Mezcla muy bien los ingredientes. En un plato colocar avena para rebozar y llevar al horno. Una vez cocidas se le coloca queso cremoso descremado y tomate


Panache o budín de verduras:se cocinan todas las verduras que gusten, como por ejemplo acelga, zapallo, zanahoria, tomate, zuchini, papa, y se colocadas en una budinera una encima de la otra cortadas en trozos. Luego se agrega salsa blanca previamente realizada con leche descremada.