Fueron las palabras de Gabriela Rodríguez, la mamá de Teo Agustín Quispe, el nene de 3 años que sufrió quemaduras por un caño con electricidad en una plaza de Santa Lucía.
El niño tenía 14 años y murió al tocar una ventana electrificada. Una pericia determinará si fue o no a propósito.
El próximo domingo cumplía 27 años. La desgracia ocurrió cuando quiso enchufar un alargue con un foco para tener luz. Su madre no pudo hacer nada para salvarlo.
La víctima fue un joven de 17 años. El viento había tirado el poste sobre su casa.
La víctima fue un jubilado de 79 años. Al parecer, las conexiones del rancho donde ocurrió todo eran muy precarias.
La víctima tenía 43 años y varios años tocó el güiro en la banda del "Yeyo". Junto al cuerpo había un alargador con los cables pelados.
Dijeron que la desgracia se pudo haber evitado, pues llamaron al menos 3 veces reclamando por el cable caído.
Se trata del nene que ayer murió al tocar un cable en la puerta del club San Pedro.