Viajar junto a la mascota de la casa puede ser una experiencia maravillosa, pero hay que tener en cuenta ciertas cosas para asegurarse el bienestar del animal.


1-Papeles: Asegurarse de que esté al día en sus vacunas antes de partir. En caso de que se enferme a mitad de camino, un veterinario podrá tratarlo mejor si tiene acceso a su historial.


2-Hacer salidas de práctica o miniviajes: Es importante que la mascota esté familiarizada con el auto antes de emprender un trayecto largo. Intentarlo llevarlo con en viajes cortos para que se acostumbre al auto en movimiento.


3-Embellecerlo: Hacerlo bañar y arreglar. Así viajará con un animal limpio, lo cual representará una experiencia mucho más agradable para todos los que vayan en el auto.


4-Asegurar su jaula o arnés: Ya sea que la mascota se sienta más cómoda con un arnés o dentro de una jaula, estar seguros de que queden bien fijos, para seguridad de todos. Eso evitará que el animal salga de su espacio, lo cual podría resultar peligroso al momento de manejar.


5-Comida: Darle alimentos ligeros antes de salir a la ruta. Un estómago lleno puede provocar mareos y accidentes dentro del auto. Cuando se termine el viaje, normalizar la comida como siempre.


6-Hacer paradas frecuentes: Detenerse en paradas de descanso o en parques con frecuencia. Darle a la mascota pausas para caminar, reducirá las probabilidades de que ocurra un accidente.


7-Buscar un hospedaje especial con anticipación: Revisar qué hoteles  permiten el acceso a mascotas. Si se piensa hospedar con amigos o familiares, asegurarse que no hay inconvenientes.


8-No dejar que saque la cabeza por la ventanilla: Aunque pueda parecer divertido, mantener la cabeza del animal dentro del auto mientras maneja. Otro vehículo o algún desecho volador podrían provocarle heridas en la cabeza. Además, un perro que asoma la cabeza por la ventanilla puede ser una distracción para otros conductores.


9-Llevar suficiente agua: Llenar botellas de agua en casa o comprar embotellada en el camino. El agua de la canilla de sitios a los que la mascota no está acostumbrada podría provocarle problemas digestivos o incluso diarrea.
 


Fuente: Selecciones