EL 7 de septiembre de 2022 se conmemoró 160¦ Aniversario de la Escuela de Fruticultura y Enología, que eternizara Domingo F. Sarmiento y quien echó los primeros fundamentos. Creía que no podía haber democracia si los ciudadanos no se educaban. En sus comienzos fue llamada Quinta Normal Agrícola de San Juan. Hoy, 15 de febrero, al cumplirse 212 años del natalicio del Maestro de América, recordamos su visión sobre la Educación Agropecuaria para San Juan y el país.

"En su mensaje a la H. Cámara Legislativa del año 1862, dice que: sirviéndose de la Ley de Irrigación sobre expropiación por causa de utilidad pública, y aprovechando la buena voluntad del propietario, el Gobierno ha adquirido el fondo llamado de Ortega, de tres cuadras y media, sito en el interior de las calles-ancha y destinándolo a la Quinta Normal". (Aubone, 1938, p.65). Estas calles anchas fueron la del Norte y del Este, actuales Avenidas 25 de Mayo y España.

 

Adelantado a su tiempo

Esta institución fue más que un elemento civilizador donde se impartían conocimientos agrícolas, científicos y técnicos. Fue el Jardín, que hermoseaba y perfumaba la Ciudad de San Juan, enmarcado por las pampas estériles -como decía Sarmiento-. Fue también la primera institución que permitió a los educandos proyectar conocimientos para evitar el avance del desierto y el valor de forestar y cultivar presurosamente las tierras sanjuaninas. 

Con ello, Sarmiento se adelantó 200 años, ya que pretendía que los sanjuaninos adoptaran un modelo de vida o se educaran respetando el medio ambiente. Comprometiendo a los educandos a un proceso de "alfabetización ambiental", que si faltaba esta alfabetización perjudicaba a la sociedad. 

A pesar de su alejamiento de San Juan, Sarmiento nunca se olvidó de la Quinta Normal. Y mucho menos de su lúcido discurso donde expuso sus inquietudes y los objetivos de su creación. En una carta remitida a su nieto Augusto Belin, fechada en Buenos Aires, enero de 1875. "Entre mis discursos me falta el de la apertura de la Quinta Normal. Han de publicarse". (Epistolario de Domingo. F. Sarmiento, 2001, p.176 y 177). 

Después de doce años, Sarmiento le solicitaba a su nieto la búsqueda de este discurso, que según él se encontraba en su casa de Zonda. Entre 1885 y 1886 la Quinta Normal se traslada al antiguo departamento suburbano de Desamparados. "Recién en 1886, durante el primer gobierno del doctor Carlos Doncel, y gracias al estímulo y empeño de unos cuantos hombres, como don Juan M. Zavalla, el inspector de Agricultura e Irrigación, don Gabriel Álvarez, don Juan Maurín, don Manuel José Zavalla , el director de la Quinta, monsier Martain y el doctor Secundino (sic) J. Navarro, que la presidía, la escuela se remoza".

 

Ubicación actual 

"Adquiere los terrenos de experimentación que hoy posee en Desamparados". (Castro Bustos, 1939, p.36). Algunas características de este antiguo departamento fueron dadas a principios del siglo XX y retrata cómo fue el espacio geográfico y paisaje en las cercanías de esta escuela.

"A pesar de ser este departamento considerablemente poblado, contando con numerosos barrios ya obreros, ya agricultores, su mayor núcleo de vecindario está radicado en la calle Real, avenida espaciosa, con buenos edificios, con lujosos chalets, con jardines y huertas que limitan a sus costados. 

En esta calle se encuentra la pequeña plaza del Departamento, la Iglesia, Municipalidad, subdelegación de policía y la Escuela N. de Fruticultura y Aprovechamiento, que ocupa un estensa (sic) quinta cubierta de plantíos escogidos". (Fernández- Castro, 1910, 98). 

La Calle Real es la actual Avenida del Libertador General San Martín, que ya comenzaba a ser una de las principales vías de acceso en sentido oeste-este a la Ciudad de San Juan. En esta nueva ubicación, de la Escuela de Fruticultura y Enología se rigió bajo el siguiente reglamento.

En el artículo 1º decía que "El objeto de esta escuela según reza el programa de estudios y que recién en el año anterior ha obtenido una formal orientación, es el de ‘difundir los conocimientos necesarios a la implantación, mantenimiento y producción de un establecimiento de arboricultura frutal y de elaboración y aprovechamiento de los productos, formando, de esta manera, personal apto en estas especialidades’".

Sarmiento sembró las primeras semillas de la Enseñanza Agrícola en la República Argentina, por ello parece inverosímil que todavía no se haya firmado el decreto en el que declare a esta célebre institución Monumento Histórico Nacional.

Los comienzos de la escuela

"Esta escuela tiene en la actualidad alrededor de 40 alumnos y el cuerpo de profesores está compuesto en la siguiente en la siguiente forma: Director, Ingeniero agrónomo señor Ramón Corregido. Secretario, señor Emilio Palero. Administrador, contador, Amaro Fernández. Profesores: Enrique Müller, perito agrónomo y Carlos Storni. Ayudantes: Enólogo Roberto Gómez, perito agrónomo, Carlos Osset". (Fernández- Castro, 1910, 98, 99 y 100). 

En este marco, las ideas y obra de Sarmiento adquiere cada vez más vigencia, a partir de sus frases: "La absoluta desnudez del potrero es un error capital". "No me detendré a detallar todas las deficiencias de nuestra agricultura, que no produce abundancia ni de frutos exportables, ni de maderas, ni de cereales ni de goces. En San Juan, la vida no es barata, por más que se crea". "Haciendo por la educación más inteligente al peón, y aplicando la maquinaria a la agricultura, para economizar tiempo y brazos".