El líder libio Muamar Kadafi aprovechó su paso por Roma, donde asiste a una reunión de la FAO, para organizar una reunión con 200 mujeres jóvenes a las que animó a convertirse al Islam, según publicaron ayer los medios de comunicación italianos.
La prensa explica que el líder libio pidió a una agencia de azafatas de congresos italiana que invitase a 200 mujeres a un acto en la residencia del embajador libio en Roma.
El coronel exigió que las jóvenes tuvieran entre 20 y 35 años, superaran el metro y 65 centímetros de estatura y fueran vestidas sin minifaldas, ni escotes pronunciados.
En el acto, que se convirtió en una lección sobre el Corán, la supremacía del Islam y el papel femenino en el mundo árabe, se exhortó a las asistentes a convertirse al islamismo y fueron invitadas a viajar a la Meca.
A las jóvenes se les entregó una copia del Corán y del libro Verde de Kadafi, así como 50 euros.
Según ellas, el líder libio criticó el modo en el que se ve a la mujer en Occidente, donde "se convierte en un mueble que el hombre coloca dónde y cómo quiere".
Asimismo, explicó otra de las jóvenes a los medios de comunicación, Kadafi afirmó durante su discurso que "el verdadero Jesucristo no fue crucificado".
"Creen que Jesús fue crucificado, pues no fue así, crucificaron a otro que se le parecía", dijo el mandatario.