Estados Unidos superó los 20 millones de casos de coronavirus. De acuerdo con el conteo actualizado de la Universidad Johns Hopkins, solo en las últimas 24 horas fueron confirmados 221.444 infectados y 3.255 muertes por la enfermedad, a pesar del bajo número de testeos que se hicieron en vísperas de Año Nuevo. Además, el país registró un nuevo récord de hospitalizaciones por cuarto día consecutivo, y crece el temor ante un inminente colapso sanitario.

Con los casos registrados este viernes, Estados Unidos suma 20.007.149 contagios y 346.687 víctimas fatales por Covid-19, y es por amplia ventaja el país más afectado del mundo por la enfermedad.

Según las estadísticas oficiales, diciembre fue el peor mes de la pandemia en todo el territorio, tanto en términos de contagios como de muertes y hospitalizaciones. En los últimos 30 días, los tres indicadores superaron los picos de abril -cuando Nueva York y los estados vecinos colapsaron- y de mitad de año, cuando el brote se propagó por gran parte del sur y el oeste del país.

Aún así, muchos especialistas, incluido el asesor presidencial Anthony Fauci, afirman que el final de la crisis sanitaria es todavía lejano, y pronostican un aumento de las cifras en las próximas semanas como consecuencia de las reuniones y de los viajes de fin de año.

Mientras tanto, este viernes por la tarde ascendían a más de 125.300 los internados en Estados Unidos como consecuencia del coronavirus: el número más alto de la pandemia, de acuerdo con el portal especializado The Covid Tracking Project. Ante esta situación, se acrecienta el temor por un inminente colapso del sistema de salud en múltiples distritos.

Una de las autoridades que más preocupan a las autoridades es California, donde no solo la tendencia de casos, muertes y hospitalizaciones está en alza, sino que además en los últimos días se confirmaron nuevos contagios con la cepa de coronavirus descubierta en Inglaterra, que se caracterizada por ser más contagiosa.

El aumento de las internaciones en el condado de Los Ángeles, el más poblado del estado, está empujando a los hospitales al “borde de la catástrofe”, señaló la doctora Christina Ghaly, directora de los servicios de salud locales.

Según informó la CNN, el estado ya cuenta con camiones refrigerantes listos por si sus morgues colapsan. En tanto, algunos hospitales confirmaron que se vieron obligados a ubicar pacientes en los pasillos, los hall de entrada y hasta en sus confiterías, ante la irrefrenable demanda de camas.

La situación es similar en el vecino distrito de Arizona, donde funcionarios de salud estatales advirtieron que la cantidad de nuevos casos sigue en alza, al igual que las cifras de hospitalizaciones y de muertes.

Mientras tanto, en el estado sudoriental de Georgia, donde el número diario de hospitalizados se duplicó desde mediados de noviembre, un centro de convenciones de la ciudad de Atlanta volvió a usarse este viernes como hospital de campaña por tercera vez desde el inicio del brote.

Las camas del centro de convenciones “ayudarán a garantizar que nuestros hospitales continúen teniendo la capacidad que necesitan para pacientes con y sin Covid-19”, explicó el gobernador Brian Kemp.