El Reino Unido arranca el domingo en pánico y con la Policía en las callas tras un nuevo atentado, el segundo en menos de dos semanas en el país, que dejó siete muertos, además de los tres autores, y casi 50 heridos anoche en una zona de bares de Londres.

 

Tres hombres atropellaron con su furgoneta a los transeúntes que caminaban por el Puente de Londres antes de abandonar el vehículo y lanzarse a acuchillar a gente en Borough Market, una zona llena de bares y restaurantes en torno al mercado. La Policía abatió a los tres hombres.

 

“Por desgracia, acaban de confirmar que siete personas han muerto”, declaró la jefa de la Policía londinense, Cressida Dick. Además hay 48 personas hospitalizadas.

 

Muchos heridos fueron tratados en el lugar por lesiones que los servicios de emergencia catalogaron como “menos serias”.

 

“A las 22:08 (21:08 GMT) de ayer empezamos a recibir avisos de que un vehículo había atropellado a los transeúntes en el puente”, dijo el portavoz. “El auto continuó conduciendo del Puente de Londres a Borough Market “, añadió.

 

La muerte de los sospechosos se produjo “a los 8 minutos” de que la policía recibiera el aviso del incidente, se congratuló el portavoz. Los sospechosos llevaban algo que parecían cinturones explosivos pero luego se revelaron falsos.

 

Entre los heridos figuran cuatro franceses y un australiano, según indicaron los responsables de los gobiernos respectivos.

 

El atentado ocurre a cuatro días de las elecciones legislativas y es el segundo en el Reino Unido en menos de dos semanas, tras el que dejó 22 muertos en Manchester el 22 de mayo, en un concierto de Ariana Grande .