Un operario de 19 años murió en el yacimiento minero Farallón Negro, en el departamento catamarqueño de Belén y a 380 kilómetros de la capital, al caer por una ‘chimenea‘ de 80 metros de profundidad, informaron ayer las autoridades. El trabajador Jairo Chayle era empleado de la empresa subcontratista ‘Panadine‘.