Miguel Angel Palma (25) se abstuvo ayer de defenderse de la acusación de ser uno de los partícipes del brutal crimen de quien aún era su esposa aunque de hecho estaba separado de ella: Cristina Olivares, asesinada de unas 180 puñaladas el pasado 7 de julio en Pocito. Por el aberrante homicidio (agravado por alevosía, premeditación y el número de personas) están presos Palma, su novia y principal sospechosa, Rosa Videla, la cuñada de esta joven, Noelia Corvalán, y un hermano de Videla, Ramón, a quien le atribuyen encubrimiento y podría recuperar su libertad, dijeron fuentes judiciales.
