¿Y ahora, Juan? Pizzi observa de cerca una jugada en el partido inaugural en Moscú, donde Rusia tuvo su festival con el 5-0 sobre Arabia Saudita. Al DT argentino le preguntaron en la conferencia si pensaba seguir en el cargo y él apeló a la ironía en un momento tan duro.

Justo en el Mundial donde Argentina marca el récord histórico de tener cinco entrenadores en la cita máxima del fútbol, algo inédito en la historia para cualquier nación, Juan Antonio Pizzi se comió la mayor goleada en un "partido inaugural", los cuales se disputan en este formato desde "Inglaterra 1966". Fue un golpe histórico para el técnico santafesino, de 50 años, que llevó incluso a que un periodista abriera la conferencia de prensa "consultándole" si pensaba seguir en el cargo post 0-5 ante el anfitrión, Rusia, para abrir el Grupo A. Claro, hay un antecedente que avala esa "teoría" de una salida fulminante: el brasileño Carlos Alberto Parreira, que venia de ser campeón con Brasil en 1994, estuvo apenas los dos primeros juegos del Mundial en "Francia 98" y tras sendas derrotas, la familia Real de Arabia Saudita decidió finalizar el contrato. "Le agradezco mucho la consulta, más en este momento y con el estado de ánimo que tengo ahora", le "agradeció" Pizzi al periodista en su primera respuesta tras el waterloo.

"Son esos días donde no sale nada de lo planeado".

 "Más allá de hoy (por ayer), veo una evolución del equipo".

 Juan Antonio Pizzi -  DT Arabia Saudita


Pizzi acababa de sufrir un impacto tremendo. Su semblante pasó del "vamos a jugarle de igual a igual a todos" del miércoles a "debemos sacarnos la vergüenza que tenemos todos encima luego de este resultado". Se mostró desencajado y con respuestas más bien a la defensiva, Juan Antonio, quien no pudo llevar a Chile a este Mundial y fue despedido, en lo que resultó un pésimo cierre a su primera experiencia con un seleccionado.


Del quinteto histórico de entrenadores en este Mundial compuestos por Jorge Sampaoli (Argentina), Héctor Cúper (Egipto), José Pekerman (Colombia) y Ricardo Gareca (Perú), Pizzi fue el primero en salir a la cancha y su inmenso tropezón, según sus palabras, se basó en que "cometimos demasiados errores. No creo que Rusia haya hecho tantas cosas bien como para una diferencia de este calibre". Lo cierto es que en la cancha se vio otra realidad: dos equipos de diversos niveles, sin que los anfitriones lleguen a ser una maravilla.


La caída de Arabia quedó como la segunda mayor goleada en el arranque de un Mundial, solo superada por el 7-1 de Italia a Estados Unidos, en 1934, con la particularidad que por entonces todos los partidos en la fase inicial se disputaban de manera simultánea. Desde el Mundial en Inglaterra en los '60 se comenzó a tener un "partido inaugural".


Igualmente, el 0-5 de los dirigidos por Juan Antonio quedó muy lejos de ser la peor caída en los mundiales. Ese sitio "nefasto" lo mantiene el 10-1 de Hungría a El Salvador, en "España 1982".
Sin margen de error, Pizzi buscará reencauzar el barco primero ante Uruguay y luego contra Egipto. ¿Podrá maquillar este papelón inicial? ¿Le dará tiempo la familia real del país que "nada" en el petróleo?