Resignado. Walter Fabián Pérez mira cómo quedó su televisor. El hombre perdió todas las cosas que tenía en su dormitorio.


Lo único que recuerda Walter Pérez es que estaba como en una pesadilla. ‘Soñaba que me estaba ahogando en el agua, que no podía respirar. Hasta que de pronto tomé una bocanada de aire y me desperté mareado, afuera de la pieza y al lado de mi hijo’, comenta el changarín. Aquello no era un mal sueño, en realidad se estaba intoxicando y su habitación ardía en llamas ayer en la madrugada. Fue un milagro que su hijo lo sacara a tiempo, caso contrario, moría asfixiado o quemado dentro de su domicilio en Villa Krause, Rawson.

Walter Fabian Pérez (47) es separado y vive con dos de sus hijos en la esquina de Ing. Krause y Quiroga. Según contó, el viernes a la noche vino muy cansado del trabajo y puso una olla en un calentador eléctrico que estaba al lado de su sommier. ‘Me acosté y sin querer me dormí del cansancio. No sé qué pasó. Sólo recuerdo que soñaba que me ahogaba y cuando me desperté estaba ardiendo todo’, relató.

Mi nuera se dio cuenta del incendio. Y después mi hijo entró a sacarme, o si no me moría

Walter Fabián Pérez - Víctima del incendio

Evidentemente, al dejar el aparato prendido se produjo el accidente y el fuego agarró el colchón. Su nuera notó que se cortó la luz a las 2.30 ayer y sintió el olor a humo, entonces le dijo a su pareja Eduardo (25), el hijo mayor de Pérez, que fuese a ver qué pasaba. Ellos viven en un departamento trasero. 

Fue así que el muchacho entró a la casa, ahí vio el fuego en la habitación de su padre y como pudo lo sacó. ‘Si no fuera por mi hijo, moría. Cuando recuperé la conciencia, quise volver a apagar el fuego pero no podía hacer nada’, relató el hombre, que perdió todos los muebles de su dormitorio, un tv, un ventilador, unas máquinas, su ropa y 200 pesos. Su nieta de 3 meses tuvo que ser asistida con oxígeno porque sufrió un principio de intoxicación, pero estaba bien. Los Bomberos de Rawson evitaron que el fuego arrasara con toda la casa.